"El precursor más importante es la hipertensión, la presión arterial alta. Las personas con hipertensión arterial persistente tienen riesgo, muchas veces mayor que el de una persona sana, de sufrir un derrame cerebral e infartos", señaló.
La hipertensión y las enfermedades coronarias son consideradas como precursoras de infartos. ¿Qué hacer para prevenirlas?
"El precursor más importante es la hipertensión, la presión arterial alta. Las personas con hipertensión arterial persistente tienen riesgo, muchas veces mayor que el de una persona sana, de sufrir un derrame cerebral e infartos", señaló.
En una entrevista con Moskva 24, Chernyshova señaló que para prevenir un ataque al corazón, las personas con hipertensión deben mantener una presión arterial normal constante siguiendo una medicación adecuada, que por lo general es de por vida.
Otro precursor de infartos son las enfermedades coronarias. "Lo que ocurre es que los vasos sanguíneos que alimentan el corazón se obstruyen por las placas ateroscleróticas. Un ataque al corazón no suele comenzar repentinamente en una persona sana. Al principio hay ataques de dolor en el corazón, que pueden detectarse en un electrocardiograma. Así, la persona tiene algunos años para corregir su situación", detalló.
Según la especialista, la mejor prevención no medicamentosa para las enfermedades coronarias, es llevar un estilo de vida saludable. "El desarrollo de un infarto depende en un 20% de la genética y las predisposiciones; en un 30%, del nivel y el acceso a la atención médica oportuna, y en un 50% de, un estilo de vida saludable. Esto incluye actividad física, una dieta adecuada, una buena rutina de sueño, descanso y el control del estrés", concluyó.