La evaluación realizada por una red de hospitales sobre la eficacia de la administración de plasma en pacientes con covid concluyó que no se producen beneficios significativos en comparación con el uso de placebos.
La información surge de una investigación realizada en 12 hospitales de todo el país.
La evaluación realizada por una red de hospitales sobre la eficacia de la administración de plasma en pacientes con covid concluyó que no se producen beneficios significativos en comparación con el uso de placebos.
“Los resultados del estudio PlasmAr muestran que entre los pacientes hospitalizados con neumonía por COVID-19 con criterios de gravedad, el uso de plasma de convalecientes no produjo un beneficio clínico significativo a los 7, 14 o 30 días de seguimiento en comparación con el uso de placebo”, dice el informe presentado por el Hospital Italiano. Las demás entidades que participan son el Hospital Italiano San Justo, Clínica Zabaia (CABA), Sanatorio Agote (CABA), Hospital Británico (Rosario), Clínica Santa Isabel (CABA), Hospital Universitario Austral (PBA), Hospital Zonal Ramón Camilo (Bariloche), Hospital Ramos Mejía (CABA), Hospital Privado de Comunidad (Mar del Plata), Sanatorio de la Trinidad (CABA) y Hospital Privado (Córdoba).
El ensayo clínico conocido como Plasm-ar consistió en la aplicación de plasma a pacientes convalecientes comparado con placebo para el tratamiento de la neumonía por covid-19 con criterios de gravedad. El estudio tenía como propósito evaluar si la administración de plasma proveniente de personas que se curaron de la infección por coronavirus COVID-19 (es decir plasma que tiene los anticuerpos contra este virus) es segura y eficaz para el tratamiento de neumonía grave por COVID-19.
Este ensayo fue aprobado por los Comités de Etica institucionales y entes reguladores pertinentes en cada jurisdicción y recibió la financiación parcial del Consejo de investigación del Hospital italiano de Buenos Aires, como así también de cada una de las instituciones participantes Además, el CONICET brindó su colaboración para que el equipo del Instituto Leloir pudiera desarrollar el análisis de anticuerpos. Participaron del estudio 334 pacientes y el promedio de edad fue de 62 años, con una mayor proporción de varones (31,8% eran mujeres.)
Con respecto a los donantes de plasma, estos fueron invitados a participar a través de redes sociales y para poder ser elegido debieron cumplir con la normativa general de donantes de sangre de la Dirección Nacional de Sangre y Hemoderivados y ,a su vez, presentar una cantidad de anticuerpos lo suficientemente alta de acuerdo a las normativas nacionales e internacionales.
Con el propósito de demostrar la eficacia del plasma de convalecientes, a cada paciente que ingresó al estudio se lo asignó de manera aleatoria a una de las dos ramas del ensayo: plasma de convalecientes o placebo (solución salina). Por cada dos pacientes que recibió plasma, uno recibió solución salina. El estudio fue doble ciego, es decir, ni el equipo médico tratante ni los pacientes sabían en qué rama habían sido asignados. Mientras los pacientes estaban internados se les realizó el monitoreo habitual y, una vez dados de alta domiciliaria, se los controló con visitas telefónicas hasta el día 30 posterior a la infusión. En caso que el paciente siguiera internado se realizó su seguimiento dentro de la institución.
Adicionalmente, todos los pacientes recibieron el tratamiento estándar para COVID19 consensuado en la institución donde se encontraban internados y ningún paciente quedó sin tratamiento.