Un estudio elaborado por el hospital José María Cullen de la ciudad de Santa Fe constató que el avance de la vacunación disminuyó los ingresos a la Unidad de Terapia Intensiva (UTI) y las muertes por coronavirus.
Entre mayo y julio ingresaron a la terapia intensiva 230 pacientes. El 74% no estaba inoculado. Sólo siete tenían las dos dosis, pero integraban el grupo de riesgo.
Un estudio elaborado por el hospital José María Cullen de la ciudad de Santa Fe constató que el avance de la vacunación disminuyó los ingresos a la Unidad de Terapia Intensiva (UTI) y las muertes por coronavirus.
El relevamiento contempla las internaciones que se realizaron desde el 1 de mayo hasta 31 de julio del 2021 (92 días). De los 230 pacientes que ingresaron en ese periodo, un 74% (193) no estaba vacunado y el restante 26% (67) sí lo estaba.
No obstante, cabe aclarar que el 90% de los inoculados sólo había recibido una dosis. En tanto, todos los pacientes vacunados con las dos dosis presentaban alguna comorbilidad descripta como factor de riesgo: edad mayor a 65 años, hipertensión arterial, obesidad, insuficiencia cardíaca y/o inmunosupresión.
En ese sentido, la mayoría de los ingresos fueron durante mayo y el número fue disminuyendo en los meses siguiente. “Nos lleva a inferir que, a medida que se avanza en la campaña de vacunación se traduce en una disminución de los ingresos a UTI por Covid”, destacó el estudio.
A su vez, al comparar la mortalidad entre pacientes vacunados y no vacunados, desde el nosocomio destacan una “ diferencia significativa”: el 69% de los fallecidos en ese período no estaba vacunado. “Esta amplia brecha también se pudo corroborar en los pacientes que requirieron asistencia respiratoria con una mortalidad del 32% en vacunados versus 68% en no vacunado”, agregaron los médicos a cargo del relevamiento.
Por otra parte, la mortalidad global de los pacientes ingresados a UTI con diagnóstico de neumonía grave a raíz del Covid durante el período de estudio fue del 59%, valor relativamente menor en comparación con los datos reportados durante la primera ola: en el mes de abril del 2020 con un 64,3% sin ingresos de paciente vacunados.
Otro de los datos que arroja el estudio, es que el 73% de los ingresos totales de la UTI estuvieron vinculados a coronavirus con diagnóstico asociado de neumonía grave. En relación a los factores de riesgo que agravaron el curso de la internación de la población, adquirieron gran predominio la obesidad, hipertensión arterial y diabetes.
En cuanto al análisis sociodemográfico, se visibiliza la relevancia que adquirieron entre mayo y julio los grupos etarios de 40-44 y 50-59 años en función al total de pacientes atendidos. “Evidencia de manera considerable el cambio en la identificación de los grupos de riesgos más vulnerables a la patología en comparación a la atención brindada por UTI durante la primera ola con predominio de edad mayor a 65 años”, destacó el estudio.
Realizadores
Firman el estudio: Dra. Issoglio, Noelia A.; Dr. Carrizo, Nestor I.; Dr. Poletti, Juan Pablo.; Lic. Negri, Rodrigo; Dra. Filippi, María Martha; Dra. Avila, Olga.