En el calendario anual de salud, octubre figura claramente como el mes de prevención del Cáncer de Mama. No es para menos: es la primera causa de muerte por esa enfermedad que en la provincia se cobra más de 500 vidas por año.
La enfermedad tiene mayor incidencia en la población de 50 a 70 años. El diagnóstico temprano incrementa las posibilidades de cura en un altísimo porcentaje.
En el calendario anual de salud, octubre figura claramente como el mes de prevención del Cáncer de Mama. No es para menos: es la primera causa de muerte por esa enfermedad que en la provincia se cobra más de 500 vidas por año.
En esa línea, el Ministerio de Salud de la provincia organiza desde hace años distintas estrategias de concientización sobre la importancia del diagnóstico precoz de una enfermedad que tiene tratamiento y cura pero que requiere del acceso de las mujeres a esas herramientas. ¿Por qué mujeres? Porque "el principal riesgo de padecer cáncer de mama es ser mujer". Quien lo afirma, categórica, es Graciela López, directora de la Agencia de Control de Cáncer de la cartera sanitaria provincial. Pero hay otros factores que potencian el riesgo y uno de ellos es la edad: entre los 50 y los 70 años la enfermedad presenta mayor prevalencia y por eso las acciones de prevención destinadas a toda la comunidad hacen foco en ese grupo.
Entre esas acciones de prevención se cuenta la entrega de turnos para mamografías que se hará en distintos puntos de esta ciudad y de la provincia a lo largo del mes.
Justo cuando arrancó este diálogo con El Litoral, al filo del mediodía del miércoles, López terminaba la reunión con un grupo de mujeres de localidades de la costa que durante el año pasado no pudieron acceder a los controles de rutina. Por eso se las va a buscar para que se realicen el control mamográfico y a su lugar de residencia vuelven con un diagnóstico, sea porque tienen que regresar el año próximo o en un plazo menor.
Esa es una acción concreta: este jueves por la tarde se inicia la entrega de turnos para mamografías en espacios públicos de esta ciudad y de otras localidades de la provincia (ver Cronograma)
"La idea es llegar a la población objetivo de 50 a 70 años, que no se hayan realizado controles en un año o dos". Luego, con el turno programado, se van a hacer la mamografía en el Cemafe (de esta ciudad) y en otros efectores de salud según la ubicación geográfica de las pacientes. "Es una manera de volver a concientizar sobre este tema porque disminuyeron muchísimo los controles durante la pandemia", advirtió López.
Las cifras son contundentes: "se hicieron un 70 % menos de mamografías; de más de 20 mil que se hacían antes del Covid, fueron 8000 en 2020 y en lo que va de 2021 estamos llegando a las 10 u 11 mil. Pero para llegar al número prepandemia nos falta mucho". Y es importante porque "cada mil mamografías, encontramos 5 patologías".
La mamografía es el "gold standard" del diagnóstico porque permite detectar la enfermedad en el estadío preclínico. "Cuando en la palpación no se encuentra nada, en la mamografía se pueden hallar microcalcificaciones o imágenes no claras. A partir de ahí se piden estudios complementarios y, eventualmente, biopsias guiadas. Y muchas veces lo que encontramos en estadíos preclínicos son tumores in situ o preinvasores y con la escisión se termina el tratamiento y la enfermedad".
A la vez, la calidad de la mamografía mejora "porque los equipos son digitales o se digitalizan los reveladores y la imagen se ve mejor; eso nos da más tiempo desde que aparece la imagen hasta que iba a aparecer el tumor. Aún si lo encontramos en etapa clínica y hacemos los tratamientos que corresponden, vamos a tener una alta tasa de curación". En este punto, López suma otra estadística: "El 90 % de las mujeres se curan totalmente cuando las lesiones son muy pequeñas aunque tengan que hacer tratamientos porque hoy, según las características de los tumores, las terapias son individualizadas". Y "todo esto significa curación".
- Así como la pandemia limitó los controles durante 2020, la pregunta es ¿cómo opera el miedo a encontrarse con un diagnóstico adverso en la demora para realizarse los estudios?
- Es importante que la gente vea que no es un problema personal sino de la sociedad o del grupo de mujeres que están en edad objetivo y creen que es mejor no controlarse o no consultar. El mensaje es: número uno, mamografía; número dos, edad objetivo de 50 a 70 años; eventualmente ecografía que es un estudio que evaluará el médico, y todo lo que sigue al diagnóstico positivo, hacerlo rápidamente. Porque el cáncer es una enfermedad crónica, no es igual a muerte. Se extirpa, hacemos terapias suplementarias y luego un control anual y nos curamos. Esa es la gran diferencia. Además hay personas que creen que por no tener antecedentes familiares (hermana, madre, abuela, etc), no va a tener la enfermedad; sin embargo, el 90 % de las mujeres que tienen cáncer de mama no tienen ningún antecedente familiar.
La mayoría estamos en riesgo de tener cáncer de mama por ser mujeres: el mayor factor de riesgo para tener cáncer de mama es ser mujeres y tener más de 50 años.
- La población objetivo es entre 50 y 70 años, pero ¿desde qué edad conviene iniciar los controles con mamografías?
- Se puede empezar a los 40 ó 45 años. La Sociedad Argentina de Mastología habla de una mamografía de base a los 35 años y eventualmente se planifica de qué manera seguir controlando. Pero como la edad promedio en que el impacto de la enfermedad es mayor es entre los 50 y los 70 años, epidemiológicamente corresponde hacer screening o campañas masivas de tamizaje a partir de los 50. En el caso de mujeres con antecedentes familiares constatados de cáncer de mama a una edad temprana, se pide el estudio en forma temprana.
- La mamografía no es una práctica simpática para la mujer, pero es la más adecuada para tener un diagnóstico.
- No hay una práctica mejor y como las imágenes son cada vez mejores, las compresiones son menores. El diagnóstico que se obtiene es cada vez mejor y con menor compresión. Va a llegar un momento en que simplemente apoyando la mama sobre dos superficies vamos a poder tener toda la imagen. Pero es un estudio que se hace una vez por año, o cada dos. Y si encontramos un problema a tiempo, nos podemos curar.
Cronograma
Atención ampliada
En las ciudades de Santa Fe y Rafaela se entregarán los turnos en las plazas, para mujeres entre 50 y 70 años, con capacidad limitada. Las mamografías se harán en Cemafe y en el Hospital Jaime Ferré, respectivamente.
En Rosario y San Lorenzo se hará difusión de la actividad, pero los turnos se entregarán en los mismos efectores, con ampliación horaria y apertura de Consultorio de Controles mamarios.
Además, se ampliarán los horarios de atención durante el mes de octubre en los mamógrafos del Cemafe (Santa Fe); hospitales Centenario y Provincial (Rosario), Eva Perón (Granadero Baigorria), Gamen (Villa Gobernador Gálvez), Granaderos a Caballo (San Lorenzo), Adolfo Vittori (Arteaga), Jaime Ferré (Rafaela), Olga Stucky (Reconquista), San José (Cañada de Gomez), Gutiérrez (Venado Tuerto), y en Samcos de Firmat, Villa Constitución y Alcorta, Las Rosas, Armstrong, Roldán, Esperanza, Santo Tomé, Tostado, Sastre, San Jorge y San Cristóbal.