El director general del Fondo de Inversión Directa (RDIF), Kirill Dmitriev, dijo que "países como India, China, Corea, Brasil y Argentina, entre otros, podrán producir la vacuna en sus territorios".
Así lo manifestó el director general del Fondo de Inversión Directa (RDIF), Kirill Dmitriev, durante la presentación de la fórmula ante la ONU.
El director general del Fondo de Inversión Directa (RDIF), Kirill Dmitriev, dijo que "países como India, China, Corea, Brasil y Argentina, entre otros, podrán producir la vacuna en sus territorios".
"La fabricación para Rusia será de 4 millones de dosis para 2 millones de personas en diciembre. En enero y febrero produciremos decenas de millones de dosis de la vacuna para entregar en febrero en India, Brasil, China, Corea y Argentina, países con quienes ya tenemos acuerdos por 500 millones de dosis", indicó Dmitriev durante la presentación de la fórmula ante la ONU.
En la reunión también participaron el ministro de Salud ruso, Mikhail Murashko, y científicos del Centro de Investigación Gamaleya, centro que desarrolló la vacuna.
En el encuentro que se transmitió de forma virtual confirmaron que la vacuna, que fue registrada en Rusia en agosto pasado, tiene una eficacia de más del 95 % y un precio para las dos dosis necesarias de unos 20 dólares. Agregaron que la vacuna puede ser conservada a una temperatura de entre 2 y 8 grados, lo que facilita la logística de su distribución.
El presidente ruso, Vladímir Putin, dispuso este miércoles que desde la semana próxima se empiece a vacunar contra el coronavirus en su país. La orden se conoció poco después que el Reino Unido autorizara la aplicación de la vacuna de Pfizer y BioNTech también a partir de la semana próxima. En Rusia, la campaña de vacunación comenzaría con los médicos y los docentes.
Dmitriev confirmó que la Sputnik V logra su eficacia a los 7 días de la segunda dosis y 28 días después de la primera pero que el porcentaje de 91,4 por ciento podría llegar al 95 por ciento luego de 42 días.
Señaló, además, que la vacuna rusa se basa en un adenovirus, el mismo utilizado desde 1953 para combatir el ébola, y aseguró que más de 40 países, que "representan el 40 por ciento de la población mundial, expresaron interés" en la Sputnik V, de la cual ya fueron producidas 1.200 millones de dosis.