Este martes por la tarde, el gobernador provincial Omar Perotti y la Ministra de Salud Sonia Martorano mantuvieron una reunión con integrantes del comité de expertos que asiste a la provincia en la evaluación de la actual situación epidemiológica generada por la pandemia de coronavirus. Varias aristas dejó el encuentro, según pudo averiguar El Litoral, y todas las conclusiones se comunicarán este miércoles en una nueva reunión del Consejo Federal de Salud (Cofesa).
En primer lugar, se analizó la situación sanitaria con corte a la fecha en toda la bota santafesina, que pese a la escalada de contagios de los últimos días (cuyo número es progresivo y sostenido), aún se encuentra en color verde-amarillo -tomando el "semáforo" epidemiológico-: todavía ninguna región está en color rojo, es decir, en alerta sanitaria. También se habló sobre el aumento en la positividad de los hisopados, más demanda de consultas tanto en el sector público como el privado.
Este último tema preocupa. El lunes, por ejemplo, en Rosario se hisoparon unas 2 mil personas; de éstas, en el sector público hubo un rango de entre 20 y 26% de positividad, y en sector privado un 40% de testeos dieron positivos de coronavirus, con récord de consultas.
"Se dialogó sobre la capacidad que tenemos dentro del área prehospitalaria para seguir respondiendo a esta mayor demanda de testeos. Se sumaron más centros, se ampliaron los horarios, pero aún así no se descarta que la situación puede verse superada por la demanda", le dijo a El Litoral la Dra. Carolina Subirá, médica clínica y especialista en infectología, que participó de la reunión del comité.
También, se debatió sobre si en la provincia se volverá a implementar en Santa Fe el diagnóstico de confirmación por nexo epidemiológico en contactos estrechos de un "positivo" que tengan síntomas asociados a Covid, sin necesidad de pasar por PCR.
"No se decidió nada al respecto; todo se discutirá en el Cofesa, pero ésta es una herramienta que ya se utilizó en otro momento de alta circulación viral, justamente para descomprimir los centros de testeos. No tiene mucho sentido que vayan a testearse todos los integrantes de una familia de siete personas, con un miembro 'positivo', mientras el resto ya está con síntomas", puso como ejemplo la especialista.
Asimismo, se discutió la posibilidad de implementar los autotests, tema del cual los medios nacionales hablaron durante toda la jornada. Es un tema polémico, ya que estos dispositivos no están autorizados por la ANMAT y, además, no tienen trazabilidad. Es decir, que si se habilita su autorización, como son de uso doméstico, los resultados no quedan registrados en ningún lado: una persona podría realizárselo, ver que está infectada y romper el autotest: así se perdería control sobre los casos. En principio la provincia no estaría a favor de su uso.
En la reunión del comité no hubo consenso en restringir actividades sociales hoy habilitadas. "Sí el gobernador realizó un comentario sobre la posibilidad de restringir eventos masivos de más de mil personas, en función de cómo evolucione la curva de contagios, pero nada aún está confirmado. Fue sólo un comentario", dejó en claro Subirá.
Un tema delicado que se debatió en la reunión fue la duración total en los tiempos de aislamientos del personal de salud (con al menos tres dosis), que sea contacto estrecho de un caso positivo, o personal de salud contagiado y notificado. El punto giró en cuántos días de aislamiento deberá hacer, cuándo podría regresar a su trabajo ese trabajador sanitario y si se hará control de PCR.
La médica consultada amplió en este aspecto: "El personal de salud es una mano de obra escasa, limitada, irreemplazable y absolutamente necesaria en este momento de la pandemia. Y así como hay circulación viral en la sociedad, también la hay dentro de los hospitales. Entonces, si bien no tenemos saturación del sistema sanitario, el problema podría llegar si las hospitalizaciones por Covid aumentan y no hay mano de obra suficiente para la atención médica", dijo.
Los integrantes del comité que mantuvieron el encuentro con Perotti y Martorano fueron, además de Carolina Subirá, fueron los expertos sanitarios Osvaldo Teglia, Ángela Prigione, Florencia Galatti, Andrea Uboldi, Miguel Cappiello, Antonio Llorens, Gilda Tamagno y Guillermo Weisburd, entre otros.