Miércoles 12.1.2022
/Última actualización 12:19
El Centro para el Control y la Prevención de Enfermedades de Estados Unidos (CDC por sus siglas en inglés) aseguró que los beneficios de la inmunización con la vacuna desarrollada por Pfizer-BioNTech son mucho mayores a los riesgos registrados y reveló que solo una de cada 100 mil personas tuvo alguna reacción alérgica grave.
Como ocurre con las inoculaciones para otras enfermedades, la vacuna contra el Covid de Pfizer cuenta con algunos efectos adversos que se investigaron desde su creación y que, de acuerdo a los esquemas del Ministerio de Salud de la Nación son catalogados como Eventos Supuestamente Atribuidos a Vacunas e Inmunizaciones (Esavi).
En su definición, entre estos efectos secundarios se ubica “cualquier situación de salud no esperada (signo no favorable o no intencionado, hallazgo anormal de laboratorio, síntoma o enfermedad) que ocurre posterior a la vacunación y que no necesariamente tiene una relación causal con esta”.
Síntomas comunes de la vacuna Pfizer
Dolor / Inflamación en la zona de la inyección
Las autoridades sanitarias estadounidenses mostraron que luego de que se administraran 1.893.360 inyecciones de la vacuna entre el 14 y el 23 de diciembre, se documentaron 21 casos de anafilaxia, la alergia provocada por el fármaco.
“Una propuesta de valoración para que alguien decida vacunarse es si las consecuencias negativas que podría provocar el Covid-19 son mayores que el riesgo de una reacción grave por la inmunización”, señaló la titular de CDC Nancy Mesonnier.
De todas formas, la institución manifestó que los sitios de vacunación están listos para tratar la alergia con epinefrina.
De los 21 casos que registraron la alergia luego de recibir la dosis, el 90% ocurrieron en mujeres, con una edad promedio de 40 años. Las autoridades también indicaron que de ese total, 17 fueron dados de alta, mientras que cuatro fueron hospitalizados, sin registrarse ninguna muerte.
Síntomas Pfizer-BioNTech registrados en los primeros minutos
Sensación de cierre de garganta
Por qué las vacunas generan efectos secundarios
Como ocurre con cualquier medicamento, al recibir una vacuna, el sistema inmunitario recibe una alerta y aprende a resistir infecciones específicas, activa las defensas, reconoce el virus o bacteria y produce anticuerpos. Es decir, la reacción inmune aparece naturalmente como respuesta a la carga viral. De esta forma, el cuerpo recordará cómo combatir ese microorganismo en el futuro. Si bien se puede experimentar reacciones indeseadas, esto no significa que algo está mal, sino que es la señal de que se está desarrollando una defensa.
Cuánto duran las reacciones secundarias
Los efectos adversos no deberían prolongarse más de dos días. En el caso de que las reacciones a la vacuna Comirnaty -elaborada por Pfizer-BioNTech- superen las 72 horas, puede utilizarse un tratamiento sintomático (Paracetamol) de venta libre, dentro de los 14 días posteriores.
En la Argentina, el responsable de asumir el rol de farmacovigilancia es el Ministerio de Salud de la Nación, que se encargada de analizar e investigar las causas sobre posibles eventos adversos relacionados con la vacuna.
Si los efectos continuaran, el paciente debe informar en el mismo establecimiento donde recibió el fármaco, para que registren el caso en el sistema, se asegure su atención y se inicie la investigación. Aunque cada país elabora sus propios procesos de seguimiento, todos siguen las pautas de la Organización Mundial de la Salud (OMS).
Miocarditis y Pericarditis
Aunque la mayoría de las reacciones adversas son esperadas, suelen ser leves y desaparecen en el corto plazo, también se han reportado efectos posteriores graves. En un estudio reciente, la Agencia Europea de Medicamentos confirmó el riesgo de desarrollar miocarditis y pericarditis al vacunarse con Pfizer BioNTech o Moderna, aunque en un número de uno cada 10.000 personas.
Las personas con mayor riesgo de experimentar estas inflamaciones cardíacas son los hombres jóvenes y, con más frecuencia, luego de la segunda dosis.
Ambos efectos secundarios ya permanecen bajo vigilancia y los pacientes que tengan síntomas relacionados con palpitaciones, dificultad de respiración, ritmo cardíaco irregular o dolor torácico, deberán consultar directamente con un cardiólogo para comenzar con el tratamiento más adecuado.