El documento es sólo de carácter declarativo y no cuenta por ahora con reconocimiento oficial del gobierno nacional. De acuerdo a datos de Migraciones, 40.913 argentinos completaron su esquema de vacunación en otros países.
268 porteños que informaron haber recibido la vacuna contra el COVID-19 en el exterior ya solicitaron que se les extienda una constancia -de carácter declarativo- hasta tanto el Gobierno Nacional defina la homologación para estos casos. Serían, según estimaciones de Migraciones, 40.913 los argentinos que declararon haber sido inoculados fuera del país.
Los ciudadanos de CABA que recibieron las dosis en otra nación ya pueden registrarse para el empadronamiento a través de BOTI, el chat automatizado del gobierno porteño, +54 911 5050 0147, y recibir así un certificado declarativo. ¿Cómo sigue el trámite? La persona debe ingresar la opción certificado COVID y solicitar buscar certificado en dónde el sistema le pedirá el número de DNI y al no encontrar información asociada al usuario, le mostrará la opción revisar datos, donde se debe responder en qué país y fecha se recibieron la o las dosis, como así también se le habilitará la opción de adjuntar una imagen del DNI y la constancia de vacunación recibida en la nación en cuestión y le pedirá un email en donde se enviará el mencionado documento declarativo.
Con esta acción, el distrito de la ciudad de Buenos Aires se convirtió en la primera jurisdicción en habilitar el empadronamiento para los “viajeros vacunados”. Por el momento no hay un protocolo definido a nivel nacional, por lo cual esta actualización no aparecería en la aplicación Mi Argentina, que es el documento oficial de viaje que acredita ese status desde comienzos de septiembre.
La Dirección de Control de Enfermedades Inmunoprevenibles será la encargada de validar la información declarada ante los protocolos e investigadores pertinentes e incorporar la aplicación de la vacuna contra COVID-19 en el Registro Federal Nominalizado de Vacunación (NOMIVAC).
Desde el 6 de septiembre está en vigencia la Credencial de Vacunación Digital (CVD) de la app Mi Argentina, el certificado que funciona como pasaporte sanitario para los argentinos ya que es el documento oficial de viajes internacionales que acredita la vacunación contra la Covid-19 realizada en el país.
Agustín Suárez, subsecretario de Ciudad Inteligente del Ministerio de Educación e Innovación porteño, a cargo de la iniciativa, explicó: “Uno puede pedir el certificado COVID-19, este trámite está activo desde junio. Cualquier persona que se vacunó en la Ciudad puede pedir el certificado QR homologado por el Ministerio de Salud porteño, el cual informa que se recibió una o dos dosis en los centros o postas de vacunación porteños”.
“Existen dos casos en donde es necesario chequear la información para extender de manera correcta el documento: los que recibían la vacuna e inmediatamente pedían el certificado y/o por errores de tipeo o datos. En el camino revisar datos se puede rectificar esta información. Para aquellos que se dieron la vacuna en el exterior, pregunta cuándo se vacunó esa persona, dónde, -es decir en qué país- y con qué vacuna/esquema de vacunación, foto del DNI y el certificado otorgado por esa nación, y un email para poder enviar este certificado declarativo”, agregó.
Según datos que brindó el funcionario a este medio, 184 mil personas ya pidieron el certificado de vacunación COVID-19 en la ciudad de Buenos Aires a través de BOTI, alrededor de 3 mil casos tuvieron complicaciones a la hora de encontrar los datos.
“Durante 2021, el 60% de los servicios que se incorporaron a ese servicio por WhatsApp están relacionados con la pandemia. De las más de 5 millones de conversaciones registradas en BOTI, más del 75% fueron referidas al COVID-19, ya sea consultas de testeos, vacunación y otro tipo de pregunta relacionada. Este registro en particular le permitirá al Ministerio de Salud de la ciudad estimar con mayor precisión cuántos porteños aún no fueron vacunados, al descartar los porteños inoculados en el exterior y cuánta más información se tenga es mejor para tomar mejores decisiones”, amplió.
Según informaron a este medio desde el Ministerio de Salud de la Nación, en el caso de las personas que viajaron al exterior y se vacunaron, se precisa un certificado oficial especial expedido por la autoridad sanitaria de cada país.
En la ciudad de Buenos Aires, el ministro de Salud Fernán Quirós precisó el último viernes: “hasta el día de hoy en la ciudad aplicamos 3.961.444 dosis de vacuna, es el 99% de todas las vacunas que nos han entregado desde el Gobierno nacional. Si uno considera las personas con primera dosis de las que son mayores de 18 años, ya el 93% han tenido la aplicación de la primera dosis”.
“Cuando vemos la cantidad de vacunas aplicadas, 2.247.387 personas en la Ciudad ya recibieron la primera dosis, eso representa el 73% de la población. Y 1.714.057 personas ya recibieron la segunda dosis, lo que hace una tasa de vacunación completa del 56% de los porteños”, añadió.
No se puede certificar vacunaciones en el exterior sino hay un documento oficial de ese país. Los funcionarios argumentaron que si la certificación la emitiera el Instituto Nacional de Salud de los Estados Unidos o un organismo similar sería distinto, pero no es algo que esté sucediendo. Lo que se puede emitir como documentación oficial es una constancia de que se recibió una vacuna en el exterior, no una certificación por una cuestión de declaración jurada.
La implementación de la Credencial Digital Internacional de la aplicación Mi Argentina está disponible para todos los ciudadanos argentinos que se hayan vacunado en el territorio nacional, la misma se genera a través de los datos cargados en el Registro Federal de Vacunación Nominalizado (Nomivac). Incluye qué marca de vacuna fue aplicada, la fecha, el lote, el número de dosis y lugar de inoculación.
La credencial digital internacional de vacunación contra el COVID-19 fue desarrollada por la Secretaría de Innovación Pública de la Jefatura de Gabinete de Ministros y presentada en julio pasado. Tras un trabajo conjunto de varias dependencias estatales: el Ministerio de Salud, la Dirección de Migraciones; la Administración Nacional de Aviación Civil (ANAC) y el Ministerio de Relaciones Exteriores. Se decidió que éste sea el documento oficial para acreditar la inoculación dentro de la Argentina y para demostrar la inoculación al viajar al exterior, de hecho funciona como un pasaporte sanitario argentino.