El Super Bowl es un circo impresionante que mira el planeta entero (el año pasado fue seguido por 115 millones de personas) y no sólo por la cuestión deportiva.
El cantante estadounidense encabezó el esperado espectáculo. “Es el honor de mi vida finalmente tener una actuación de mi lista de deseos", dijo.
El Super Bowl es un circo impresionante que mira el planeta entero (el año pasado fue seguido por 115 millones de personas) y no sólo por la cuestión deportiva.
Es que, sin dudas, uno de los momentos más esperados es el show del medio tiempo. Y este año el elegido fue Usher que arrancó con una puesta en escena infernal en el centro del campo con la compañía de cientos de bailarines.
Llegado el fin de semana y, tras mucho suspenso, la NFL hizo oficial la confirmación del artista estadounidense a través de un posteo compartido en Instagram junto al cantante y compositor.
“Es el honor de mi vida finalmente tener una actuación de Super Bowl de mi lista de deseos. No puedo esperar para darle al mundo un espectáculo diferente a todo lo que hayan visto antes de mí”, expresó el cantante cuando se confirmó su presencia.
Pasadas las 22.20 de la Argentina, el cantante estadounidense bajó las escaleras de un escenario circular al ras del campo de juego que permitía una perfecta visión en 360 del Allegiant Stadium de Paradise, Nevada.
El desafío de Usher era resumir 30 años de carrera en 13 minutos. El el Allegiant Stadium se prendió fuego Superstars. Y después le siguió Love in this club.
Claro. Por eso apareció Alcia Keys para la intro de My Boo en un piano de cola. Después, recorrieron la pista (ella como de rojo, como en el video original) para interpretar juntos el hitazo de 2004.