Mauro Icardi vivió un mal momento en el country Santa Bárbara cuando la periodista Gabriela Mandato estaba haciendo una crónica periodística mostrando su casa.
El futbolista reaccionó con dureza a lo ocurrido en la propiedad donde vive y demandará al barrio cerrado Santa Bárbara.
Mauro Icardi vivió un mal momento en el country Santa Bárbara cuando la periodista Gabriela Mandato estaba haciendo una crónica periodística mostrando su casa.
En medio de este contexto, Juan Etchegoyen aportó información sobre la reacción que el futbolista de Galatasaray tuvo puertas para adentro y un feroz llamado a su equipo de abogados.
La conductora, Gaby Mandato, no dudó en romper con las estrictas reglas del barrio cerrado en el que vive en un móvil.
“Ustedes saben que el otro día hubo un hecho periodísticamente hermoso que fue cuando en Desayuno Americano ingresaron al country donde vive Icardi. Tengo novedades para contar”, empezó diciendo el conductor de “Mitre Live” (lunes a viernes a las 17 por las redes sociales de la radio).
En ese sentido, profundizó su información: “Me contaron que después de esto que pasó, Mauro tuvo un ataque de nervios con sus abogados y les dijo claramente que tomen cartas en el asunto y hagan una millonaria demanda al country Santa Bárbara. Él se indignó porque Gabriela Mandato (la periodista que estaba haciendo su trabajo) empezó a mostrar su vivienda y a dar datos desde adentro del country”.
“Pregunté por la demanda y me dijeron que si bien todavía no está radicada la denuncia sería por violación a la intimidad y propiedad privada”, añadió Etchegoyen que luego sumó más datos.
“Está claro que él está en todo su derecho a enojarse por esto, hubo algunos vecinos del lugar que también se enojaron por esto. Pero yo defiendo lo periodístico y la realidad que en Desayuno Americano hicieron lo que tenían que hacer”, dijo al respecto el comunicador en las últimas horas.
Y cerró: “Me describieron que el ataque de nervios de Icardi fue total en ese momento. Llamó a sus abogados y les exigió que la cifra de la demanda sea algo ejemplar para que no se repita. ‘Es todo una locura, ni en mi casa puedo estar tranquilo’ les habría dicho Mauro a sus letrados”.