Este miércoles, Colón de Santa Fe enfrentó a Talleres por Copa Argentina de Fútbol. El partido se disputó en la provincia de Mendoza y motivó una nueva movilización de hinchas "rojinegros" que viajaron para acompañar a su equipo. Cuatro amigos de la capital provincial que asistieron al encuentro sufrieron un gravísimo accidente durante el regreso, pero sus peripecias no terminaron allí. Luego, cuando eran asistidos en un centro de salud de Río Cuarto, fueron víctimas de ladrones.
"Viajamos para Mendoza un día antes. La idea era descansar bien por la noche y regresar apenas terminara el partido", explicó Micaela Cétola.
Luego de la derrota del "sabalero", los cuatro amigos abordaron el Toyota Ethios en el que se movilizaban y emprendieron el regreso a casa.
Ya anochecía y estaban aproximadamente a mitad de camino cuando se desencadenó un evento dramático que milagrosamente no terminó en tragedia. "Circulábamos por la ruta nacional 8 y pensábamos entrar a Río Cuarto, pero estaba muy oscuro y no había señalización. No se veía nada. Yo manejaba y de golpe apareció adelante uno de esos baldes grandes que se usan en la construcción. Por esquivarlo me metí en donde estaban arreglando el pavimento. Di varios volantazos y terminamos volcando. Dimos como tres vueltas antes de que el auto se detenga", recordó Micaela.
Rápidamente la escena se llenó de policías, gendarmes, bomberos y médicos.
"Mucha gente vio el vuelco y se pensó lo peor. Una ambulancia nos llevó al hospital, pero ahí no se ocuparon demasiado. Nos revisaron un poco y nos dijeron que nos podíamos ir. Cuando salíamos del centro de salud, cerca de las 4 de la madrugada, nos dimos cuenta de que nos habían robado. Le había dejado a un guardia mi mochila y desapareció, con dos celulares y mi billetera, entre otras cosas. Nos quejamos, pero nos tomaron el pelo. Nos dijeron que no se hacían responsables, que la cámara de vigilancia no andaba y que nosotros debíamos haber cuidado las cosas", se lamentó la "sabalera".
Micaela estaba con dolores en distintas partes del cuerpo todavía en horas de la siesta de este jueves, cuando habló por teléfono con El Litoral y todavía no había arribado a su casa. "Apenas llegue me voy a hacer todo tipo de estudios, porque en Córdoba no nos dieron mucha bolilla", enfatizó.
"Es una vergüenza la falta de señalización en esa ruta nacional. Es un peligro -remarcó-. Todavía no entiendo cómo no nos matamos. Los mismos policías nos decían que denunciemos esto, porque se cansaron de pedirle a las autoridades que mejoren las condiciones de seguridad en esa parte".
En la billetera, la joven tenía tarjetas de débito y crédito, también el carné de conducir. "Tuve que dar de baja todo. Usaron mi cuenta de Mercado Pago para hacer compras. Se ve que allá no le piden DNI para la operación".
Finalmente, Micaela se quejó de que las autoridades del fútbol argentino hayan dispuesto que el partido se juegue en un lugar tan lejano. "La vida de los hinchas se pone en riesgo en viajes tan extensos y más en ese tipo de rutas. Sabemos, porque se informó en grupos de sabaleros, que hubo al menos otros tres accidentes de tránsito como el nuestro. Afortunadamente, ninguno de ellos fue fatal", concluyó.