Por Carlos Retamal
La víctima, identificada como Marcelo Procopp, recibió entre 10 y 12 disparos cuando esperaba junto a familiares y amigos, el cortejo que traía los restos de su hermano menor, quien fue asesinado en la noche del domingo.
Por Carlos Retamal
Este martes 23 de febrero, minutos después de las 10, se produjo un nuevo homicidio, el segundo en lo que va del año en Villa Gobernador Gálvez. El crimen tuvo lugar a pocos metros del ingreso al cementerio municipal de esa ciudad, cuando la víctima estaba junto a familiares y amigos esperando la llegada del coche fúnebre con los restos de su hermano, quien fue asesinado el domingo por la noche.
Fuentes del Ministerio Público de la Acusación señalaron que mientras la víctima, identificada como Marcelo Daniel Procopp, de 45 años, estaba en el cantero central de calle Suipacha al 3000, junto a sus padres y algunos amigos de su hermano, de nombre Javier.
A pocos metros de ellos, mientras algunos chicos jugaban en la vereda, vecinos notaron la presencia de cuatro personas en dos motos, que se movían en forma extraña, según indicaron voceros policiales.
Según declaró el fiscal en turno de la Unidad de Homicidios Dolosos, Gastón Ávila, “en un momento se bajaron dos personas de las motos, una de cada una, y fueron a buscar entre las personas que estaban esperando el cortejo al hermano de quien falleció el domingo. Desde corta distancia le dispararon al menos 12 veces con munición 9 milímetros, provocándole la muerte por múltiples disparos prácticamente en el acto”, sostuvo.
Luego, los homicidas se subieron a las dos motos y se dieron a la fuga. A esa altura, los vecinos edades que previo al crimen estaban en la vereda, se habían metido en sus casas por temor a ser atacados.
El cuerpo tenía orificios en la cabeza, el tórax, brazos y espalda, efectuados desde muy corta distancia. En total son 13 orificios, pero se deberá esperar el resultado de la autopsia que se hará en el Instituto Médico Legal de Rosario para determinar la cantidad de impactos que recibió Procopp, quien quedó tendido en medio del cantero central.
La zona cuenta con cámaras de seguridad pertenecientes al municipio de Villa Gobernador Gálvez, en su mayoría colocadas en el perímetro del cementerio San Lorenzo, que estaban en funcionamiento y cuyas imágenes serán vistas por el fiscal y personal de la Agencia de Investigación Criminal (AIC) para ver si se pueden identificar a los autores.
El fiscal señaló también que no pudo tomarles declaración a los familiares de la víctima, ya que todos estaban en estado de shock y con temor a nuevos ataques. “No tengo seguridad de que puedan reconocer a los autores ya que salieron corriendo”, agregó Ávila.
Además, adelantó que dispondrá que la familia tenga custodia policial en la puerta de su domicilio “porque están asustados y tienen temor de que haya un nuevo ataque. Incluso pueden llegar a tener temor a hacer alguna declaración”.
El fiscal Ávila también hizo mención a que el hombre asesinado en la mañana de este martes había hecho declaraciones a Canal 3 de Rosario en las cuales pidió saber qué había pasado con su hermano. “Él no había sido testigo presencial del hecho, lo que expuso en los medios fue un pedido de esclarecimiento, que también tengo entendido que se lo hizo al personal policial. Yo lo iba a entrevistar mañana (por el miércoles), ya que quedamos en esperar hasta después del velatorio”, aclaró.
Marcelo Procopp había dicho ante cámaras de televisión que no sabía por qué habían asesinado a su hermano; que él no estuvo en ese momento en la casa ya que había salido a hacer un mandado y que le dijeron que habían pasado dos personas en moto que se pararon y lo mataron casi en la puerta de su casa.
Además, Marcelo aclaró que había estado de viaje las últimas dos semanas y que había vuelto durante el fin de semana. Y en un momento de su exposición indicó que “aparentemente, él (por Javier), no estaba metido en nada. Vivía acá, estaba siempre con miedo y no salía a ningún lado”.
Javier Alejandro Procopp, de 36 años, fue asesinado a tiros cerca de las 20 del domingo a pocos metros de la puerta de su casa, ubicada en Edison al 800, entre Monteagudo y Stephenson, de Villa Gobernador Gálvez, cuando dos personas llegaron en moto y le efectuaron varios disparos a quemarropa, uno de ellos en la cabeza, a modo de remate.
Voceros de la investigación señalaron que la víctima recibió al menos 6 disparos de arma de fuego que impactaron en el abdomen, la zona del tórax y en la cabeza. Personal del gabinete criminalístico secuestró 6 vainas servidas calibre 9 milímetros que fueron enviadas a peritar.
Con la muerte de Marcelo Procopp ya son 19 la cantidad de homicidios en el departamento Rosario durante el mes de febrero y 31 los asesinatos cometidos en 2021.