Una semana después de su detención en la ciudad de Córdoba, Candelaria Salas recuperó la libertad en Santa Fe, luego de firmar una condena de 3 años de prisión condicional y resarcir económicamente a tres víctimas de robos con inhibidores de señal.
Una cordobesa de 27 años, acusada de cometer una serie de hurtos con inhibidores junto con su hermano prófugo, fue condenada este martes.
Una semana después de su detención en la ciudad de Córdoba, Candelaria Salas recuperó la libertad en Santa Fe, luego de firmar una condena de 3 años de prisión condicional y resarcir económicamente a tres víctimas de robos con inhibidores de señal.
La mujer de 27 años fue imputada el jueves pasado en los tribunales de Santa Fe como coautora del delito de "hurto calificado por el uso de elemento semejante a llave". La figura legal -reiterada en tres oportunidades-, refiere a la fórmula vulgarmente conocida como "robo con inhibidores", cometidos entre febrero de 2022 y marzo de 2023, todos en la playa de estacionamiento del hipermercado ChangoMás, ubicado en barrio El Pozo.
Durante la audiencia de la semana pasada, la mujer estuvo representada por el abogado local, Héctor Acuña, quien tras entrevistarse con familiares de la implicada, informó a la fiscalía de la posibilidad de resarcir a las víctimas como parte de un acuerdo que le permita a Salas recuperar la libertad.
Este martes estaba fijada la audiencia para el tratamiento de la prisión preventiva, pero ante las gestiones de las partes, los fiscales Rosana Peresín y Manuel Cecchini impusieron a la jueza Cecilia Labanca del mencionado acuerdo, en cual fue ratificado por Salas y su defensa.
Los hechos endilgados fueron tres. El primero se produjo en horas del mediodía del 17 de febrero de 2022, en la playa de estacionamiento del hipermercado ubicado a la vera de la ruta nacional Nº 168.
A bordo de un Peugeot 308 blanco dominio AA375GU, Candelaria Salas, junto con su hermano Gustavo Iván Salas -el cual se encuentra prófugo-, abrieron una camioneta Chevrolet Tracker gris, de la que sustrajeron $ 30.000 y un par de anteojos de sol, "haciendo uso de un artefacto inhibidor de la señal del cierre centralizado de puertas y de alarma", según reza la pieza judicial.
La misma maniobra se repitió el 1° marzo de 2023, a las cinco de la tarde, cuando en el mismo lugar y circunstancias, los hermanos Salas abrieron un Audi gris oscuro del que sustrajeron seis tarjetas de crédito y débito de distintos bancos, junto con el DNI del titular de los plásticos y un teléfono I-Phone 10 negro.
Al día siguiente, el 2 de marzo de este año, los cordobeses bloquearon el sistema de cierre centralizado de una camioneta Toyota Hilux gris oscuro de la cual se llevaron $ 1.300.000 que se encontraban debajo del asiento del acompañante. La víctima, venía de realizar una operación bancaria, en una sucursal del Puerto Plaza, por lo cual pudo acreditar el origen y legalidad de los fondos.
A partir de las cámaras de seguridad del hipermercado se iniciaron tareas de inteligencia que estuvieron a cargo de la Agencia de Investigación Criminal (AIC) y que los condujeron a la provincia de Córdoba.
Pero antes, con los datos del auto sospechoso, los investigadores recorrieron un par de hoteles alojamiento de la zona de la terminal, en uno de los cuales constataron que se alojaba la pareja de hermanos.
Según se pudo conocer, los Salas estuvieron entre el 28 de febrero y el 1° de marzo de 2023 en un hotel de calle Irigoyen Freyre al 2300, ocuparon la habitación N° 55 y como en otras ocasiones, abandonaron el lugar en forma abrupta.
Además, un informe del Centro de Monitoreo Integrado de la ciudad indicó que el 28 de marzo pasado también recorrieron diferentes áreas del centro comercial y puerto de Santa Fe, por lo que no se descartan otros hechos.
Finalmente, el mes pasado fueron localizados en la vecina provincia. Se establecieron sus domicilios y cuentas de redes sociales, por lo que vía exhorto judicial los fiscales Peresín y Cecchini solicitaron allanamientos, secuestros y detenciones.
La medida se llevó a cabo el 25 de abril, en tres vivienda del barrio Alberdi de la capital mediterránea, en una de las cuales se hallaron inhibidores de señal y la ropa que utilizaron para cometer los ilícitos, además de un aparato denominado "pandora".
Solamente la mujer quedó detenida, ya que su hermano no estaba en la casas al momento de la irrupción policial. Se trató de un operativo en forma conjunta con la Policía de Córdoba que permitió secuestraron el vehículo utilizado para cometer los hurtos, además de una suma aproximada de 400 dólares, más de 80 mil pesos argentinos, una notebook y celulares.
Este martes, la fiscalía solicitó "se condene a Candelaria Salas a la pena de 3 años de prisión de cumplimiento condicional, con más la obligación de reparar el daño causado en la suma estipulada". Como parte del resarcimiento -que cuenta con la conformidad de las víctimas-, la mujer debió entregar $ 100.000 por los dos primeros hechos; en tanto el último de los damnificados, recibió U$S 1.300 a cambio del millón trescientos sustraído, lo cual representa menos de la mitad del botín al cambio paralelo o dólar blue.