Una oportuna intervención de un grupo de vecinos de barrio Santa Lucía y de los Bomberos Zapadores, permitió salvarle la vida a un niño de 11 años que había quedado atrapado en un incendio, en un dramático suceso ocurrido la noche del miércoles.
El pequeño, de 11 años, dormía en su habitación cuando un aire acondicionado se recalentó y comenzó a emanar humo.
Una oportuna intervención de un grupo de vecinos de barrio Santa Lucía y de los Bomberos Zapadores, permitió salvarle la vida a un niño de 11 años que había quedado atrapado en un incendio, en un dramático suceso ocurrido la noche del miércoles.
Todo comenzó cerca de las 22 cuando la Central 911 dio cuenta de un incendio en una vivienda de Roque Sáenz Peña 1800. Al arribo de los bomberos se constató que había "un proceso combustivo" en el interior del inmueble, más precisamente en el primer piso, con riesgo de propagación hacia el resto de la finca.
El personal actuante entrevistó a vecinos del lugar quienes manifestaron que en el interior de la vivienda se encontraba un menor de edad y 2 perros.
Por lo expuesto los servidores procedieron a realizar tareas de búsqueda y rescataron al niño, a quien a posterior se lo pudo identificar como Gustavo, de 11 años. El niño pequeño sacado por una ventana trasera de una de las habitaciones de la segunda planta, la cual linda con una terraza.
Acto seguido, el chico fue auxiliado con un equipo de respiración asistida debido a que presentaba problemas de respiración. También se rescató a los dos animales caninos de raza Caniche, los cuales presentaban problemas de respiración.
Poco después se entrevistó a un hombre de 35 años, padrastro del damnificado, quien manifestó que el menor se encontraba durmiendo solo en la casa cuando en un momento dado el inmueble quedó envuelto en humo.
Al advertir una columna de humo que salía de la vivienda, varios vecinos dieron el aviso a los bomberos. Según trascendió el causante de dicho siniestro pudo haber sido el mal funcionamiento de un aire acondicionado que se había recalentado.
Momentos más tarde se hizo presente la progenitora de los mencionados, quien al ver la situación de su esposo, quien sufre de insuficiencia renal, solicitó la unidad sanitaria.
Ante la demora de la ambulancia se procedió a trasladar al hospital Cullen al hombre quien se había descompensado. Tras ser examinado se indicó que se encontraba fuera de peligro , y que no había inalado monóxido de carbono quedando en observación por el momento,
Acto seguido se comisionó el médico de la repartición para que se dirija al Hospital Alasia a examinar al menor de edad, quien había sido trasladado por una unidad del Servicio 107.
Por último poco antes de la medianoche se informó de todo lo acontecido al fiscal en turno quien dispuso que se le de intervención a la Subsecretaria de la Niñez.