Jueves 17.6.2021
/Última actualización 18:03
El mismo día en que Colón se preparaba para dar el primer grito de Campeón -el viernes 4 de junio-, efectivos de la Agencia de Investigación Criminal (AIC) y de la Comisaría 1ra. de San Javier realizaron varios allanamientos en busca de objetos robados en la zona, en lo que se considera una escalada del delito y la violencia en al menos cuatro barrios de la ciudad costera.
Si bien los resultados no fueron los esperados, durante ese fin de semana y los días posteriores cayeron cinco muchachos, algunos de los cuales cuentan con antecedentes penales a pesar de su juventud.
Uno de ellos, fue apresado el mismo 4 de junio en horas del mediodía, cuando alentado por el efecto del alcohol y tal vez alguna otra sustancia, acudió a la comisaría a reclamar por su amigo "Chuncho" R. que estaba preso desde esa madrugada por un hurto.
Los policías del lugar no tardaron en identificar al interesado, conocido por su apodo de "Guili", sobre el cual también existía un pedido de "comparendo" por varios delitos.
Se trata de Sergio Ceferino Caraballo, de 24 años, quien curiosamente al día siguiente de su detención -el 5 de junio- se le vencía una condena anterior, también por delitos contra la propiedad.
Caraballo fue imputado el domingo 6 de junio en los tribunales de Santa Fe y dos días después la jueza Sandra Valenti ordenó la prisión preventiva, solicitada por el fiscal de San Javier, Francisco Cecchini.
El representante del Ministerio Público de la Acusación (MPA), señaló que "al hombre que quedó en prisión preventiva se le endilgan cuatro hechos ilícitos cometidos en un período de 18 días", y aclaró que "ocurrieron poco tiempo después de que el imputado dejó un establecimiento penitenciario en el que estuvo detenido a raíz de una sentencia condenatoria".
La seguidilla atribuida a Caraballo comenzó el 16 de mayo, cuando pasadas las 16 , asestó dos puñaladas a otro sujeto en inmediaciones de Juan de Garay y Poeta Julio Migno. Luego, entre la noche del 26 y la madrugada del 27 de mayo, forzó el ingreso de un galpón de La Criolla, en zona rural, donde sustrajo una caja de herramientas.
Un día antes de que fuera detenido, el 3 de junio, en horas de la siesta, en compañía de "Chuncho" R. saltaron un tapial para entrar a una casa de calle Dr. de la Colina al 500, de donde sustrajeron $ 20.000, una linterna, una cuchilla y documentación a nombre de la dueña de casa, que es una mujer de avanzada edad.
Finalmente, fue privado de la libertad cuando violó las disposiciones sanitarias vigentes por la pandemia de coronavirus, al no poder justificar su presencia en la comisaría, en un estado lamentable y en busca de su amigo preso.
En el caso de "Chuncho" R. recuperó la libertad bajo alternativas, el sábado 5 de junio, en una audiencia en la que se le imputó el delito de hurto calificado por escalamiento. En tanto Caraballo afronta cargos por los delitos de "lesiones leves dolosas; robo; hurto calificado por escalamiento; y violación de las medidas adoptadas por las autoridades competentes para impedir la propagación de una pandemia".
Por otra parte, el jueves pasado el fiscal Cecchini llevó a otros dos hombres de 27 y 32 años a los estrados santafesinos, donde el juez Gustavo Urdiales les dictó la prisión preventiva, por la gravedad de los ilícitos atribuidos como por los antecedentes penales que pesan sobre uno de ellos.
La medida cautelar dictada por el juez Urdiales alcanza a Nelson Ezequiel Robles y Walter Jonatan Melgarejo, por hechos cometidos durante el primer fin de semana de junio.
En el caso de Robles, "se le endilgó la comisión de tres ilícitos", uno de los cuales fue en colaboración de Melgarejo, quien "cuenta con un antecedente penal condenatorio", dijo el fiscal Cecchini.
El domingo 6 de junio, ambos ingresaron por la fuerza a una vivienda del barrio Central Norte, de donde se llevaron un equipo de música y un parlante. "Una mujer que reside en el domicilio intentó detenerlos, pero el menor de ellos la amenazó de muerte con un elemento que parecía ser un arma de fuego", explicó el acusador.
En tanto a Robles se le atribuyeron otros tres hechos. Uno en inmediaciones de Cacique Aletín y Echagüe y Andía, donde con un palo de escoba con un cuchillo en la punta, insultó y persiguió a una vecina que debió refugiarse en su casa. También provocó heridas cortantes con un cuchillo a otro vecino. Y por último, golpeó, pateó y rompió el respaldo de una cama del hospital público donde debió ser asistido por lesiones sufridas en una aprehensión civil.
Un quinto delincuente, identificado como Jonatan Emanuel Díaz, quedó en prisión preventiva este martes 15 de junio. En este caso, el fiscal Cecchini lo responsabilizó por los delitos de "robo calificado por ser en poblado y en banda, en grado de tentativa" por el cual fue detenido en flagrancia el sábado pasado; y un "robo simple" consumado en mayo, ambos cometidos en la ciudad de San Javier. La cautelar fue dictada por el juez Luis Octavio Silva.
Archivo El Litoral A partir de los allanamientos y primeras detenciones empezamos a tener otra respuesta en la gente, reconoció el fiscal Francisco Cecchini."A partir de los allanamientos y primeras detenciones empezamos a tener otra respuesta" en la gente, reconoció el fiscal Francisco Cecchini.Foto: Archivo El Litoral
"Predisposición y confianza"
"En las últimas semanas hubo muchos hechos contra la propiedad y contra las personas, principalmente en los barrios Central Norte, Santa Rosa, Once y San Francisco", reconoció el fiscal de San Javier, Francisco Cecchini.
"Ello venía generando alguna intriga en la ciudad, por la cantidad de robos que estaba habiendo, por lo que tomamos dos medidas", dijo. "Primero fueron los allanamientos por los objetos robados", que si bien "no tuvimos el éxito esperado" permitieron encontrar "algunas armas que no ameritaron detenciones".
"Por otro lado, las circunstancias nos forzaron a nosotros, me refiero a hechos en flagrancias, que generaron detenciones inmediatas o a las pocas horas", cuyos responsables "veníamos investigando por otros hechos recientes". "Eso derivó en las prisiones preventivas de cuatro personas (Caraballo, Robles, Díaz y Melgarejo) y hubo otra imputación más que terminó con alternativas a la prisión preventiva porque el chico (C.R.) no tenía antecedentes penales", detalló el fiscal.
En tanto, Cecchini destacó que "cuando se iniciaron los primeros reclamos de la vecinal San Francisco, por esta situación de inseguridad, salimos a tomar testimoniales, a buscar a la gente para que declare, pero hubo una reticencia muy grande. Y a partir de los allanamientos y primeras detenciones empezamos a tener otra respuesta y logramos que más gente comience a declarar". En definitiva, "esos movimientos generaron de parte de los vecinos otra predisposición y confianza a la hora de recurrir a las autoridades", que trabajaron en forma conjunta y mancomunada.
Prensa AICEl viernes 4 de junio, la Agencia de Investigación Criminal (AIC) junto con la Comisaría 1ra de San Javier realizaron un importante despliegue en las zonas más candentes de la ciudad, que consistió en más de doce allanamientos simultáneos.
El operativo, llevado a cabo en los barrios El Triángulo, San Francisco y Central, permitió en secuestro de siete armas de fuego de diferentes calibres; dinero en efectivo; una máquina para recargar cartuchos; cartuchería de diferentes calibres; y otros elementos denunciados como sustraídos. En tanto, seis personas fueron identificadas en el marco de la investigación.