María Lezcano, una de las primeras peritos en llegar a 9 de Julio para investigar la desaparición de Loan Peña, compartió detalles de su experiencia en el caso.
Fue una de las que primeras que analizó la investigación y brindó diferentes hipótesis sobre lo que sucedió con el menor.
María Lezcano, una de las primeras peritos en llegar a 9 de Julio para investigar la desaparición de Loan Peña, compartió detalles de su experiencia en el caso.
Convocada por el comisario Walter Maciel, Lezcano lamentó que, durante los primeros días del caso, no se le permitiera salir del hotel donde se alojaba, lo que impidió su trabajo en el lugar de los hechos.
“Solamente se puede decidir abandonar una búsqueda cuando se resuelve el caso, se encuentra el objetivo de búsqueda. En este caso, ninguna de esas cosas han sucedido. Entonces, no se puede abandonar nunca una búsqueda”, enfatizó la investigadora en declaraciones radiales
Lezcano fue firme en su opinión sobre la situación de Loan, afirmando: “El niño nunca salió del lugar. Yo pienso que hoy todo lo que se dice que está pasando, las versiones en los últimos tiempos y demás, son totalmente descabelladas”.
Las sospechas recaen sobre la posibilidad de que alguien en el entorno familiar del menor ha tenido un papel en su desaparición. Lezcano subrayó que, sin un hallazgo claro y sin el testimonio del niño, no se puede descartar la implicación de personas cercanas a él. Esta incertidumbre deja a la abuela Catalina en una posición comprometida, rodeada de dudas sobre su responsabilidad.
Además, aseguró que el campo donde se realizó la búsqueda es “limpio” y recordó que si se hubiera llamado a Loan, el niño podría haber regresado rápidamente.
Aunque no pudo afirmar que el niño hubiera estado en el naranjal, explicó que “eso es lo que dicen los que hoy están detenidos e imputados”, pero sin pruebas contundentes que lo corroboren.
La perito concluyó presentando dos hipótesis sobre la desaparición: “Una es la del accidente. Y la otra no la puedo develar, por una cuestión de respeto a su familia y porque no quiero ser violenta o apresurada en mis dichos”.
La teoría que complica a la abuela y el entorno familiar del niño continúa en el centro de la investigación.