Un hombre de 34 años fue arrestado este jueves por la tarde en las calles de Helvecia, ciudad cabecera del departamento santafesino Garay.
Fue sorprendido por personal policial de la Unidad Regional VII en la zona céntrica de la cabecera del departamento Garay, a una cuadra de la costanera.
Un hombre de 34 años fue arrestado este jueves por la tarde en las calles de Helvecia, ciudad cabecera del departamento santafesino Garay.
Está acusado de ser el ladrón que asaltó la casa de una mujer de 87 años de barrio Fomento 9 de Julio, en Quintana al 2900, durante los primeros días de marzo de este año. La víctima sufrió fuertes golpes que le ocasionaron gravísimas lesiones en la cabeza.
Según pudo saberse, una patrulla del Cuerpo Guardia de Infantería de la Unidad Regional VII se topó con dos sujetos encapuchados que se movían de manera sospechosa por la zona céntrica de la ciudad costera.
Los uniformados decidieron actuar para identificarlos. Así se percataron de que uno de ellos era F.R.M., de 34 años, alias "El Mendocino", un viejo conocido de las comisarías de la zona que tenía dos pedidos de captura.
Lo buscan por el robo de una moto en Cayastá y también por el asalto de calle Quintana al 2900, por lo que rápidamente fue remitido a la capital provincial, donde quedó a disposición del fiscal de esta última causa, el doctor Manuel Cecchini.
El sujeto que lo acompañaba -domiciliado en barrio Barranquitas de Santa Fe- también fue trasladado a sede policial, por prevención.
Alicia tiene 87 años y llevaba una vida totalmente normal en su barrio hasta la medianoche del pasado jueves 6 de marzo.
Ella vivía sola y estaba ya durmiendo cuando el delincuente ingresó a su casa por el patio trasero. La encontró acostada en la cama y cuando ella intentó levantarse la ató con un acolchado. Al tenerla totalmente indefensa, la golpeó salvajemente en el rostro. Le provocó una fractura en uno de sus pómulos y coágulos en el cerebro, entre otras lesiones.
El ladrón escapó por el frente y su figura quedó registrada por cámaras de vigilancia privadas de la zona. La víctima, poco después, logró desatarse y salir a la calle para pedir auxilio a los vecinos.
Terminó internada en la Unidad de Terapia Intensiva del Hospital Cullen. Fue dada de alta días más tarde, pero al poco tiempo nuevamente su condición empeoró sensiblemente. La golpiza fue sin piedad.
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