El profesor de educación física J.T., acusado por una serie de abusos sexuales a alumnos del jardín Ceferino Namuncurá, recuperará su libertad. Así lo dispuso el juez Jorge Patrizi, quién también ordenó la apertura de juicio.
Las madres presentaron un escrito en disconformidad con la decisión del juez Jorge Patrizi, por la que J. T. podrá ser excarcelado y esperar el juicio oral en libertad con una caución real previa de 20 millones de pesos y una serie de reglas de conducta.
El profesor de educación física J.T., acusado por una serie de abusos sexuales a alumnos del jardín Ceferino Namuncurá, recuperará su libertad. Así lo dispuso el juez Jorge Patrizi, quién también ordenó la apertura de juicio.
J.T. permanece en prisión preventiva desde octubre de 2021, y con la investigación en su contra ya concluída, podrá ser excarcelado y esperar el juicio oral en libertad. Para esto, primero deberá cubrir una caución real de 20 millones de pesos, y luego tendrá que cumplir con una serie de reglas de conducta.
Tras conocerse la noticia, un grupo de madres de nenes que asisten al jardín protestaron este jueves frente a los Tribunales santafesinos. “Vinimos a presentar un escrito por la disconformidad que tenemos con la decisión del juez Patrizi, que nos tomó muy por sorpresa que nos hayan llamado para avisarnos que el señor con veinte millones ya podía estar en su casa...y tampoco sabemos cómo un simple profesor puede llegar a tener veinte millones de pesos”, comentó a El Litoral Judith Quiroz, una de las manifestantes.
“Estamos con mucho miedo de lo que nos pueda pasar, no solo por nuestras hijas sino por nosotros también porque recibimos muchas amenazas, desde siempre, y ahora más que nada, que nos van a hacer cosas, si seguimos con la denuncia”, añadió, aunque aseguró que no se callarán “con nada”: “Del jardín nos han llamado para ofrecernos plata, pero yo exijo justicia, que ese hombre pague lo que le hizo a mi hija”, insistió.
“Yo hice la primera denuncia, el 5 de octubre”, recordó Judith. “El mismo día, llegó otra denuncia y después, las siguientes, y muchas mamás que se nos acercaron a hablar y decirnos que estaban pasando por la misma situación pero que no querían exponer a sus hijos, llevarlos al psicólogo y otras cosas”, agregó.
“Como mamá trabajé siempre para poder mandarla a mi hija a un colegio privado, teniendo la posibilidad de mandarla a otro jardín, público, y en el lugar donde más la tenían que cuidar, la lastimaron”, considero Judith.
“Ahora tenemos que esperar el juicio, mientras él está tranquilo en su casa”, lamentó. “Yo el otro día tuve que retirarla a mi nena del colegio tres horas antes de que termine su jornada porque lloraba y lloraba y no es justo que nosotros tengamos que estar viviendo esto, estar hoy acá, en lugar de estar trabajando, con nuestros hijos, pidiendo justicia por algo que es realmente obvio”, opinó y advirtió que “están todas las pruebas”. “No sé qué espera el juez, que le pase lo que le pasó al otro juez que dejó en libertad a un abusador”, concluyó.