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La Justicia dio un paso más en la causa Dolinsky, cuando la semana pasada rechazó un planteo defensivo, para invalidar la cámara Gesell realizada a la víctima. La coimputada se presentó por escrito y estaría en Brasil.
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El camarista penal Bruno Netri declaró inadmisibles sendos planteos del empresario maderero Alberto Héctor Dolinsky, y de su coimputada brasileña, Lindaci Da Silva -prófuga de la Justicia local-, tras solicitar la declaración de invalidez de la cámara Gesell realizada a una joven menor de edad, que habría sido víctima de abuso sexual por parte de la pareja. El escrito firmado el martes de la semana pasada agrava la situación procesal del principal investigado, para quien la querella insiste con el cese de la prisión domiciliaria.
El 11 de mayo último se iba a realizar una audiencia para la revisión de la medida cautelar morigerada -prisión domiciliaria con salida laboral- con la cual el imputado de 69 años fue beneficiado tras ordenarse su detención el año pasado, en el marco de una grave denuncia en perjuicio de una niña de 12 años. Dicha audiencia se debió suspender por razones de salud, y todavía no fue reprogramada por la Oficina de Gestión Judicial.
Giro inesperado
Mientras tanto “la causa tuvo un giro inesperado” cuando los primeros días de marzo se presentó por escrito la coimputada Lindaci Da Silva Miranda, prófuga para la Justicia santafesina, según reveló el abogado querellante José Ignacio Mohamad, que representa al papá de la víctima.
“Se presentó a través de un escrito que lleva la firma de un abogado del fueron local. Allí la mujer planteó la invalidez de la cámara Gesell realizada a la víctima”, que era menor de edad al momento de ocurridos los hechos, sostuvo el querellante.
Como correlato del proceso judicial, dicho planteo fue rechazado “in-limine” el 9 de abril por el juez penal Nicolás Falkenberg, es decir, “sin que fuera tratado”. Contra ese decreto que rechazó in-límine la petición, “por no encontrar adecuación a las disposiciones del Código Procesal”, tanto la defensa del imputado Dolinsky, como de la mujer, “impugnaron el decreto por el cual se rechazó la presentación, y el juez de la segunda instancia Bruno Netri declaró inadmisible el recurso de apelación el martes 22 de mayo”, refirió el Dr. Mohamad.
Pedido de penas
Para la querella, esta situación hace más compleja la situación judicial de Dolinsky, en tanto “nos encontramos a la espera de la nueva fecha para la audiencia de modificación de la prisión preventiva domiciliaria, en la que vamos a pedir la prisión preventiva efectiva; y además nos coloca en un grado total de certeza en relación a la prueba, que es base del proceso, que es la cámara Gesell” realizada el 24 de enero de 2017 a la víctima, completó el letrado.
Cabe destacar que la fiscal de Violencia de Género y Familiar y Sexual, Alejandra Del Río Ayala, pidió al juez de la OGJ que dicte la captura internacional para la mujer de nacionalidad brasileña, atento al avanzado estado de la causa.
La carpeta judicial en cuestión ingresó en la llamada “etapa intermedia” -previa al juicio-, cuando el 26 de marzo la fiscal del Río Ayala presentó la acusación y un pedido de pena de 15 años de prisión para el principal investigado, a quien se lo acusa por los delitos de “abuso sexual” y “corrupción de menores”. En la misma línea fue presentada en las primeras semanas de abril la acusación de los abogados querellantes Mohamad y Horacio Paulazzo, quienes respaldaron la estrategia fiscal.
En un hotel
El hecho por el cual el empresario Alberto H. Dolinsky podría ser llevado a juicio oral habría ocurrido el 2 de enero de 2014, en un hotel céntrico de la ciudad, donde residía el imputado. También allí se alojaban la niña -de entonces 12 años- y la pareja de su padre -también empresario del rubro maderero-, con quien Dolinsky mantenía relaciones de negocios y una estrecha relación de amistad. En cuanto a la mujer, de nacionalidad brasileña, no pudo ser localizada en el marco del proceso ya que se encontraría en el exterior y actualmente contaría con captura internacional.
Según la versión de la niña en Cámara Gesell, ese día, la novia de su padre junto con el imputado mantuvieron relaciones sexuales en el solárium del hotel, y luego en la habitación, fue obligada a tomar whisky y agredida sexualmente por el hombre. Por esos hechos, Dolinsky se encuentra imputado por el presunto “abuso sexual con acceso carnal calificado” (por ser cometido por dos personas) en concurso real con “promoción a la corrupción de menores agravada” (por ser la víctima menor de 13 años), según informó oportunamente la oficina de prensa del MPA.
La denuncia fue radicada por el padre de la víctima a fines de 2016, luego de que su hija contara lo ocurrido a su actual pareja. Recién entonces el progenitor inició las acciones legales ante la Unidad Especial de Violencia de Género, Familiar y Sexual de la Fiscalía Regional 1.