Un hombre de 26 años fue condenado por robarle casi un millón de pesos a quién pretendía comprarle una moto, y sustraerle una Honda CG Titán a quien lo acompañaba. Era parte de una banda (conformada por 7 personas más) que ofrecía vehículos por redes sociales y luego asaltaba o estafaba a quienes querían comprarlas.
Se trata de Julián Franco Contreras, a quien la jueza Cecilia Labanca condenó como "miembro de asociación ilícita" y coautor de "robo calificado por ser en poblado, en banda y con la utilización de armas de fuego cuya aptitud para el disparo no puedo ser acreditada".
La fiscal Laura Urquiza estuvo al frente de la investigación que logró detectar a la banda y detener a sus ocho integrantes. Crédito: Pablo Aguirre
Contreras suscribió un procedimiento de juicio abreviado, reconociendo su culpabilidad en los delitos que le atribuyó la fiscal María Laura Urquiza. Con la anuencia del defensor particular Luis Carlos Rittiner, se presentó el escrito en el que se acordó la pena de 3 años de prisión, que debido a la falta de antecedentes será de cumplimiento condicional.
Modus operandi
En concreto, Contreras fue condenado por formar parte de una asociación ilícita "de carácter estable, permanente y organizada", la cual funcionó al menos desde el mes de agosto de 2022 y hasta el 23 de agosto de 2023. Como jefe fue imputado Brian Exequiel Fernández, quien comenzó a ofrecer motos a través de redes estando preso, y continuó haciéndolo cuando recuperó su libertad.
El modus operandi de la banda consistía en publicar en redes sociales motos marca Honda Tornado XR, las que ofrecían a la venta con la finalidad de captar compradores a los cuales les brindaban un punto de encuentro. Allí los sorprendían y, mediante el uso de armas de fuego, les sustraían el dinero en efectivo que llevaban para concretar la transacción y sus pertenencias. En algunos casos pactaban la entrega de una seña, realizada por transferencia bancaria, y luego no acudían al punto de encuentro.
Robo a mano armada
De los 11 robos y 4 estafas atribuidos a la banda, Contreras fue condenado por el robo cometido el 28 de julio de este año. Tras captar un posible comprador a través de Facebook y negociar con él vía Whatsapp, pactaron encontrarse para realizar la transacción en la esquina de calles Los Negruchos y Santa Cruz.
La víctima arribó al lugar alrededor de las 14 junto a un amigo, a bordo de la moto Honda CG Titán de éste. Fue entonces que Contreras, junto a los coimputados Nicolás Franco y Joel Bautista (ambos en prisión preventiva), los interceptaron. Los primeros dos portaban armas de fuego, mientras que el tercero tenía un cuchillo.
Forcejearon, hasta que los delincuentes lograron hacerse con la motocicleta, una mochila que contenía los $960.000 que la víctima había llevado para realizar la supuesta compra, una campera, un casco blanco y un celular Motorola E7.
La banda
Julián Contreras es el primer miembro de la banda en ser condenado. Además de él, los últimos días de agosto fueron detenidas e imputadas otras siete personas, cuatro hombres y tres mujeres.
Brian Fernández (30), señalado como el "organizador" de la asociación ilícita; y Joel Bautista Nicolás Franco y Héctor S. (todos de entre 20 y 26 años), como "miembros". El último de ellos es el único que no quedó en prisión preventiva, sino que le impusieron medidas alternativas a la misma.
Cecilia Miranda tiene 38 años, es pareja de Fernández y madre de las otras dos imputadas: Avilen y Agostina Martínez, de 19 y 22 años, que son a su vez pareja de dos de los hombres pertenecientes a la organización. A las tres se les atribuyó el carácter de "miembros" de la asociación ilícita.
De los seis que permanecen en prisión preventiva, las hermanas son las únicas que la cumplen de forma domiciliaria, debido a que tienen hijos menores de edad.