A través de un procedimiento abreviado, condenaron al último miembro de la banda que orquestaba violentos asaltos pretendiendo que vendían dólares. Además de su participación en el grupo, y el robo a un camión, se responsabilizó por su participación en la emboscada frustrada que terminó con un policía herido en septiembre de 2020 en barrio Guadalupe.
Se trata de Exequiel Gastón Olivera (31), quien fue condenado por la jueza Celeste Minniti a 5 años de prisión efectiva, como "miembro de asociación ilícita" y coautor de un "robo calificado por el uso de arma de fuego -cuya aptitud no pudo ser comprobada- y por ser cometido en poblado y en banda" y de una "tentativa de robo calificado".
La investigación estuvo a cargo de las fiscales María Laura Urquiza y Mariela Jiménez -actualmente jubilada-. El acuerdo abreviado fue presentado el jueves pasado ante la jueza Minniti por la fiscal Bárbara Ilera y el defensor público Martín Durando. Olivera es el noveno -y último- miembro de la banda en ser condenado.
Olivera posee condenas anteriores por robo y portación ilegítima de armas de fuego. Según lo detalló el Ministerio Público de la Acusación, el mecánico Julio César Gutiérrez, Carlos Alberto Villalba y Néstor Rubén Mena eran los "organizadores" de la asociación ilícita, mientras que Olivera, Sergio Leonel Grecco, Exequiel Adrián Gutiérrez, Ivana Maribel Gutierréz, Ariel Joaquín Cuatrín y Hugo Alberto Almitrani participaban de la misma en calidad de "miembros".
La banda se reunía en el taller de Gutiérrez, ubicado en Mitre al 7100, donde planeaba los robos. El mecánico se encargaba de procurar los vehículos que se utilizarían y brindar a sus cómplices la información necesaria para llevar adelante los hechos delictivos.
Atraían a sus víctimas con operaciones de compra-venta de divisas, ofreciendo dólares, y se presentaban armados a los encuentros, que eran coordinados por teléfono.
Con armas
En concreto, Olivera fue condenado por su participación en dos robos. El primero se trató del asalto a un camión, ocurrido el 22 de julio en inmediaciones de Vélez Sarsfield y Ruperto Godoy.
Alrededor de las 15, junto a Mena y a un hombre no identificado, interceptó al vehículo arrojándole una bolsa de consorcio negra con fragmentos de hierro en su interior. Esto obligó al conductor a detener su marcha. Los tres ocupantes del camión descendieron y en ese momento fueron abordados por los delincuentes, que iban armados.
Mientras apuntaban a las víctimas, uno se subió al camión y sustrajo aproximadamente $ 200.000 en efectivo y un cheque de $ 30.264. Además, se llevaron los celulares de las víctimas.
Engañados
El golpe del 10 de septiembre en barrio Guadalupe marcó el principio del fin para la banda, que realizó múltiples robos a personas que intentaban comprar dólares. Con cada atraco dejaban piezas que acercaban cada vez más a los investigadores. Los engañaron de la misma forma que ellos a sus víctimas, organizando un encuentro y suplantando al "comprador" por un miembro de la Agencia de Investigación Criminal (AIC).
Cinco delincuentes se acercaron a inmediaciones de calle Piedras al 6500 para encontrarse con un hombre que pretendía comprarles U$D 5000. El agente encubierto simuló tocar timbre en una de las propiedades, y fue en ese momento que avistó a dos masculinos armados que se le acercaban. Inmediatamente les dio la voz de "alto policía", que dio comienzo al enfrentamiento.
Exequiel Olivera le manifestó "yo no tengo nada", mientras intentaba escapar del lugar, pero el policía fue más rápido y comenzó a reducirlo. Sergio Grecco, el otro miembro de la banda, apuntó al agente a menos de dos metros de distancia y gatilló, pero la bala no salió. Esto no lo detuvo, disparó de nuevo y esta vez la bala impactó de lleno en la cadera del oficial.
Hubo un tiroteo entre la policía y los ladrones que intentaban huir, y finalmente cuatro de ellos fueron aprehendidos. Al día siguiente detuvieron al quinto, y así empezaron a caer, uno por uno, hasta que terminaron todos presos. Con la resolución de la jueza Minniti, ahora todos los integrantes de la banda están condenados.
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