El Litoral
Se trata de Milton Lionel Carabajal de 20 años. El tribunal le impuso la pena que había sido solicitada por los fiscales Jorge Nessier y Cristina Ferraro.
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Milton Lionel Carabajal de 20 años fue condenado a prisión perpetua por el homicidio de Leónidas Juan Quinteros. Así fue resuelto en el marco del juicio oral y público que culminó hoy en la ciudad de Santa Fe.
La sentencia fue informada en la mañana de este miércoles, por el tribunal integrado por los jueces Sandra Valenti (presidenta), Nicolás Falkenberg y Jorge Patrizzi.
En la resolución se indica que Carabajal fue hallado autor penalmente responsable del delito de homicidio criminis causae, por haber sido cometido para consumar el hecho y robo calificado por el uso de arma de fuego en grado de tentativa, ambos delitos en concurso real.
Los fiscales que investigaron el caso fueron Jorge Nessier y Cristina Ferraro. “La sentencia fue resuelta, en términos generales, por las calificaciones jurídicas que habían solicitado la Fiscalía y la querella”, valoraron los fiscales.
En tal sentido, señalaron que “logramos comprobar que Carabajal cometió el homicidio para procurar su impunidad por el robo”.
Un tiro en la cabeza
El homicidio de Quinteros ocurrió el miércoles 11 de marzo de 2015. Minutos después de las 19, la víctima recibió un disparo de arma de fuego en inmediaciones de la avenida Blas Parera al 6900.
Quinteros realizaba tareas de vigilancia en la panadería Imperial, y su muerte se produjo mientras forcejeaba con el imputado, a quien estaba persiguiendo porque había perpetrado un robo en el local comercial que custodiaba.
“Carabajal ejecutó su accionar homicida, con el fin de asegurar los resultados del delito que había cometido minutos antes y de procurar la impunidad para sí, por lo cual le disparó dolosamente en el cráneo a Quinteros cuando intentaba impedirle su huida”, explicaron los fiscales.
“Además, el imputado ya había apuntado a la víctima adentro del local, lo había hecho arrodillar y lo había amenazado para que no lo persiguiera cuando se fuera”, agregaron los funcionarios del MPA.
Fuga y captura
El otro hecho por el que se juzgó a Carabajal es el apoderamiento ilegítimo de entre 200 y 300 pesos, robo que motivó la persecución del imputado por parte de Quinteros. “El delito lo concretó mediante el empleo de violencia física con un arma de fuego apta para el disparo tipo revólver calibre 22”, precisaron los fiscales.
Por último, el imputado escapó del lugar con el dinero sustraído y el arma de fuego con la que había disparado. Se refugió en la casa de un vecino del lugar, en la que escondió la bolsa con dinero dentro de una caja de cartón y tiró el arma de fuego al patio de la vivienda. Minutos más tarde, fue aprehendido por personal policial.
Por su parte, la víctima falleció unas horas después de ocurridos los hechos en el hospital Cullen, a raíz de las heridas que le produjo el impacto de bala que recibió”, concluyeron Nessier y Ferraro.