Un tribunal de segunda instancia de Rafaela Confirmó la condena a 20 años de prisión impuesta a un hombre por abusar sexualmente de dos niñas en Ataliva, una pequeña localidad del departamento Castellanos.
El condenado es un hombre de 49 años que abusó de su hija y de la hija de su pareja. Las víctimas son dos niñas de edad escolar de una pequeña localidad del departamento Castellanos.
Un tribunal de segunda instancia de Rafaela Confirmó la condena a 20 años de prisión impuesta a un hombre por abusar sexualmente de dos niñas en Ataliva, una pequeña localidad del departamento Castellanos.
Los camaristas Sergio Alvira, Matías Drivet y Alejandro Tizón sostuvieron que "no existen elementos para anular la sentencia" de primera instancia y rechazaron todos los requerimientos planteados por la defensa de Claudio A.V., un hombre de 49 años cuya identidad se reserva dado que es padre de una de las víctimas que lleva su mismo apellido y padrastro de la otra.
Según informó el Ministerio Público de la Acusación (MPA), la resolución fue "por unanimidad" y según expresó la fiscal del caso Ángela Capitanio, "los jueces de segunda instancia avalaron los fundamentos brindados por el tribunal del juicio oral" que se celebró en septiembre del año pasado en los tribunales rafaelinos.
La fiscal señaló que "el veredicto fue apelado por la defensa del agresor sexual", cuyo abogado defensor "solicitó la declaración de nulidad del fallo de primera instancia y la absolución o disminución de la pena impuesta". Sin embargo, "los camaristas sostuvieron que 'no existen elementos para anular la sentencia dictada'", valoró la funcionaria judicial.
Por otro lado, Capitanio destacó que "aunque la Defensa cuestionó los testimonios que las víctimas brindaron en cámara Gesell, los jueces de segunda instancia manifestaron que 'de la revisión de la declaración de ambas niñas, surge que su relato es contundente'".
En relación a los hechos, la fiscal expuso que "el hombre condenado abusó de las niñas mientras transitaban la escuela primaria", y aclaró que "atacó a su hija durante dos años y a la hija de su pareja, durante cinco".
Para la fiscalía "el condenado vulneró la integridad sexual de las víctimas en reiteradas ocasiones en las que se quedó a solas con ellas", por lo que se lo declaró autor de los delitos de "abuso sexual gravemente ultrajante" y "promoción de la corrupción de menores", en ambos casos agravado por la convivencia preexistente, por la edad de las dos víctimas; y también por el vínculo, en el caso de su hija.