Dos jóvenes quedaron en prisión preventiva este lunes en el marco de la causa que investiga el crimen de Lorena Orduña, abandonada en una esquina del norte de la ciudad de Santa Fe el 26 de diciembre pasado con una herida fatal en el pecho.
Los jóvenes quedaron en prisión preventiva. Las fiscales del caso se refirieron a la "guerra" entre bandas armadas en la que se dio el hecho.
Dos jóvenes quedaron en prisión preventiva este lunes en el marco de la causa que investiga el crimen de Lorena Orduña, abandonada en una esquina del norte de la ciudad de Santa Fe el 26 de diciembre pasado con una herida fatal en el pecho.
Se trata del novio de la víctima, Isaías Cepeda Bello (18), y un amigo, Mauro García (25), imputados recientemente por varios delitos, incluido "asociación ilícita". Al primero le atribuyeron el rol de "jefe", mientras que al otro de "miembro" de la banda criminal, que desplegaba acciones (tales como balaceras) destinadas a controlar territorialmente los barrios La Loma, Scarafía y Santo Domingo.
Además, las fiscales Alejandra Del Río Ayala y María Laura Urquiza endilgaron a Cepeda Bello un homicidio cometido el 3 de noviembre de 2023 en un taller mecánico de Ignacio Crespo al 7600, donde acribillaron a un muchacho de 22 años.
A esto le agregaron el "robo" de una moto, y el "encubrimiento agravado" del crimen de Lorena, a quien abandonó en la vía pública luego de que le dispararon. Disparo que, para las investigadoras, iba dirigido a él. Esto, sumado a que esa misma tarde el joven fue a balear una casa junto a otros miembros de su banda en represalia por lo que había ocurrido, acentúa la sospecha de que Cepeda Bello sabe quién asesinó a su novia pero no quiere decirlo.
El automóvil en el que fueron hasta la casa de Risso al 4100 desde la que habrían disparado a Lorena, para tomar represalias, participó en una persecución con la policía tras haber realizado la balacera. Todos los ocupantes escaparon, excepto el conductor, Mariano Escobar Crivelli, quien permanece tras las rejas desde diciembre. Ese hecho fue calificado como "abuso de armas", "abuso de armas agravado" y "tentativa de homicidio".
Este lunes, el juez penal Sebastián Szeifert dispuso la prisión preventiva para Cepeda Bello y García, cuyas defensas estuvieron a cargo de los abogados Pedro Busico y Héctor Tallarico, respectivamente.
Las cautelares fueron solicitadas por la fiscalía debido a la existencia de riesgos procesales, los cuales el magistrado dio por acreditados. Szeifert se refirió a la complejidad de la causa, a la gravedad de los hechos investigados y al latente peligro de entorpecimiento probatorio, debido a que los testigos a entrevistar son vecinos del barrio sobre el que la banda mantiene cierto control.
El liderado por Cepeda Bello no es el único grupo criminal en esa zona, ya en diciembre detuvieron a tres hombres pertenecientes a otra banda que se manejaba en el lugar, a la cual no pertenecería el asesino de Lorena.
Tras la audiencia, la fiscal Del Río Ayala, se refirió a la investigación: "Empezamos con el cuerpo de una chica, aun con vida, en medio de la vía pública, y eso disparó una innumerable cantidad de líneas de investigación, no necesariamente vinculadas con el hecho".
"A medida que se fue incorporando información en la causa, fuimos abriendo distintas hipótesis del caso, pero también enterándonos de otras tramas criminales que operaban en ciertos barrios del noroeste santafesino y que estaban íntimamente vinculadas con lo que le ocurrió a Lorena".
"La información que se pudo ir recopilando en las primeras horas, los primeros días, allá por el 26 de diciembre, fue muchísima, por la conexión de distintos hechos que se habían dado. Eso me llevó a pedirle a la Doctora Urquiza, que es especialista en la temática y está abocada a este tipo de casos, poder llevar la investigación adelante entre ambas".
Desde entonces, "no se ha descansado un segundo, se han hecho medidas de todo tipo: testimonios, pericias telefónicas y balísticas, pruebas de disparo, inspección de lugares y zonas, y allanamientos".
"Se han podido ir conectando, incluso, distintos hechos, cuyos autores no han sido identificados, ocurridos previamente al 26 de diciembre, con la asociación ilícita que hoy le estamos atribuyendo a dos de los integrantes de esta banda", sostuvo, y aclaró que si bien la figura penal es asociación ilícita, "nosotros hablamos de bandas, bandas criminales que operan en territorios muy pobres, en zonas de difícil acceso, incluso para el Estado y la policía, que tienen como modus operandi la violencia. Disparan a donde sea, en cualquier lugar, a cualquier hora del día".
"Lo principal es mostrar la capacidad de letalidad que tienen estos enfrentamientos, estos conflictos entre bandas. Tenemos otros casos menores, una balacera que terminó con un herido en el pie, otra que terminó con una bala en la rodilla de alguien. personas totalmente ajenas al conflicto".
Respecto al trasfondo, la fiscal señaló que "tiene que ver con muchas cosas, con la producción de otros hechos delictivos, con lo económico. Cuando allanamos la zona de Alberti, más o menos desde la vía al fondo, esos 200 metros están ocupados por familiares y allegados a uno de los imputados, lo que le otorga mucho dominio territorial y lo hace mucho más impune".
"El tener muchos domicilios en poder de ellos, donde pueden entrar y salir, pueden esconderse y esconder las armas que utilizan, pueden esconder droga, todo esto les da poder económico y les permite poder seguir cometiendo estos hechos ilícitos. Por eso también el control territorial es importante".
La fiscal señaló que si bien hay indicios de que podría tratarse de una guerra entre narcos, "cuando allanamos no encontramos nada. Tenemos muchos testimonios que dan cuenta de esto, pero no tenemos evidencia concreta como para sostenerlo. Sí sabemos que hay un trasfondo narco, de drogas, de armas".
Por último, en relación al autor del crimen de Lorena Orduña, Del Río Ayala mencionó que "de esto no puedo hablar porque sería perjudicial para la investigación. Tenemos mucha información producida y tenemos una línea bastante certera".