Indignación y dolor era lo que hoy aun flotaba entre las polvorientas calles de barrio Paprocki, en la localidad de Monte Vera.
Lo dice Nancy López, la madre del joven que fue asesinado a puñaladas la tarde del lunes. Indignación y dolor en barrio Paprocki
Indignación y dolor era lo que hoy aun flotaba entre las polvorientas calles de barrio Paprocki, en la localidad de Monte Vera.
Nadie de sus vecinos desconocía el grave hecho de sangre ocurrido en las primeras horas de la tarde del lunes, y que terminó con la vida de Sergio Martín López (17), asesinado de cinco puñaladas.
El adolescente (a quien sus íntimos lo conocían como "Antoni") era el mayor de cuatro hermanos de una esforzada familia del lugar. Tiempo atrás se supo ganar la vida en una carbonería de Monte Vera y actualmente se desempeñaba como obrero de una ladrillería.
Sergio o "Antoni", vivía junto a su madre, en una muy humilde construcción, hecha de chapas, palos y cartones, ubicada en calle Los Horneros.
El crimen ocurrido el lunes, tuvo un "anticipo" la tarde del sábado. En aquella jornada Sergio fue atacado por un tal "Pelaco", que actuó junto a otro muchacho y una mujer.
Según se supo Sergio le habría reprochado a los otros por un robo ocurrido días atrás en su casa. Tras intercambiar acusaciones todo terminó a los golpes de puño en plena calle.
Pero aquel conflicto lejos estuvo de quedar saldado. Y todo terminó de la peor manera en la tarde del lunes, cuando Sergio volvió a ser agredido.
"Yo estaba en mi casa cuando me dijeron que mi hijo estaba en un pasillo... que se estaba muriendo. Cuando fui vimos las puñaladas que tenía en el pecho. Nunca nos dimos cuenta de las heridas que tenía en la espalda. El decía que no podía respirar", narró hoy Nancy López, la madre del chico asesinado, en diálogo con El Litoral.
Consultada sobre por qué habían atacado a su hijo, la mujer dijo que "hace unos días sufrimos un robo acá. Todos sabemos que fue un hermano del "Pelaco". Como ese chico ya cometió un montón de robos, se fue, pero este fin de semana regresó. El sábado ya habían discutido. Hubo una pelea previa donde estuvieron "Pelaco" con la mujer y otro chico lo agarraron a mi hijo. Y ayer "Pelaco" de nuevo lo volvió a atacar".
"Lo único que quiero es justicia. Porque mi hijo no era malo... no sé porque le tenían tanta bronca. Quiero que el asesino quede preso. Que no lo dejen libre por buena conducta. A mí hijo ya no lo voy a ver nunca más", cerró entre lágrimas.
El ataque contra Sergio López se consumó con furia criminal.
Cinco puñaladas fueron las que terrminaron con la vida de Sergio López. Una en el muslo izquierdo; dos en el tórax y otras dos en la espalda; éstas últimas interesan parte de los pulmones.
Tras agonizar algunos minutos el adolescente fue trasladado hasta el hospital Protomédico donde pese a los esfuerzos realizados, se produjo su deceso.
Horas después varias personas protagonizaron una suerte de "pueblada" en barrio Paprocki. Armados con palos y piedras llegaron hasta la finca donde vivía el supuesto homicida y le prendieron fuego.
Acto seguido fueron hasta la vivienda donde reside la madre del imputado e intentaron repetir la acción, aunque en este caso no logró realizarse debido a la llegada de personal policial que dispersó a los revoltosos.