El juez penal Sergio Carraro rechazó un nuevo pedido para que Juan Manuel Ruffino (25) recupere la libertad. La defensa del conductor del Toyota Corolla blanco que fue utilizado en el crimen del agenciero Hugo Oldani, solicitó la revisión de la cautelar, invocando el tiempo transcurrido desde que su cliente fue detenido, lo cual fue rechazado por fiscalía y querella, que reiteraron la vigencia de los riesgos que ello implicaría para la investigación.
La audiencia, que se celebró este jueves en el subsuelo de tribunales, contó con la presencia en la sala del juez Carraro; el abogado de la querella, José Ignacio Mohamad; y la fiscal de Homicidios, Cristina Ferraro; en tanto el abogado defensor Raúl Berizo, participó a través de la aplicación Zoom.
Técnicamente, el representante legal de Ruffino pidió por ante la Oficina de Gestión Judicial, que se agende una audiencia del artículo N° 225, para la revisión de la prisión preventiva, que si bien requiere la existencia de “elementos probatorios sobrevinientes”, es decir “hechos nuevo”; también puede solicitarse por el mero “transcurso del tiempo que sobrelleva en prisión el imputado”, siempre y cuando exista “un lapso no menor de sesenta días entre las sucesivas audiencias”, según indica el código procesal de la provincia.
Aunque reiteró los mismos argumentos que utilizó en las sucesivas etapas del proceso, el Dr. Berizo hizo hincapié en que su pupilo acaba de cumplir 100 días tras las rejas, desde la imposición de la prisión preventiva, en febrero pasado. Tras una extensa exposición de la defensa, la parte acusadora rechazó los planteos y le pidió al magistrado que no modifique la condición de encierro para Ruffino.
Una vez escuchadas las partes, el juez Carraro resolvió en el acto mantener al imputado privado de la libertad, rechazando tanto las alternativas, como la morigeración de la prisión preventiva, solicitada en forma subsidiaria por la defensa.
Juan Manuel Ruffino fue detenido el 16 de febrero, en su casa paterna de calle Arenales al 9.200 del barrio Policial. Si bien estuvo en la mira de los investigadores desde un primer momento -cuando trascendió que era el dueño y que manejaba el auto en el que llegaron a la agencia y luego escaparon los asesinos-, su captura se ordenó apenas unos días después del hecho criminal, cuando pudo ser desacreditada su coartada.
El 19 de febrero, el juez penal Jorge Patrizi ordenó la prisión preventiva para el denominado “chofer” de la banda, acusado como “coautor de homicidio doblemente calificado (por el empleo de arma de fuego y por ser cometido para consumar otro delito criminis causae)”, en concurso real con el “robo doblemente calificado (por el empleo de arma de fuego apta para el disparo y por haber sido cometido en poblado y en banda)”. La medida cautelar -confirmada en segunda instancia- fue impuesta también para uno de sus cómplices, Brian Nahuel Damiani, quien en el reparto de roles fue quien se quedó esperando en la puerta de la agencia haciendo de “campana”.
Hugo Oldani fue asesinado el 11 de febrero, en horas de la tarde, cuando una banda de forajidos lo emboscó en su comercio de la Galería Rivadavia -locales 29 y 30-, que tiene ingreso por calle La Rioja 2441, en zona del microcentro santafesino. Tres hombres y una mujer arribaron al lugar en el Toyota blanco y vidrios polarizados. Tres descendieron en la esquina de Rivadavia y La Rioja y caminaron hasta la entrada de la galería. Ruffino quedó con el auto en marcha unos metros más adelante, estacionado en doble fila; Damiani aguardó en el hall de la galería y una pareja ingresó a la agencia Oldani Turismo.
Éstos últimos también se encuentran identificados. El hombre, Cristian Bruno Figueroa (21), está preso desde hace un mes y está sindicado como quien ejecutó al comerciante luego de un forcejeo por un morral cuyo contenido se desconoce. En cuanto a la mujer, recién este jueves fue informado en audiencia, que está interviniendo la Justicia de Menores, puesto que tenía menos de 18 años al momento de cometido el crimen. Está identificada, pero hasta la fecha las autoridades no pudieron dar con ella.
Fuentes del caso indicaron que producto del crimen del agenciero Hugo Oldani (66) se inició una investigación que está a cargo de la Unidad Fiscal de Delitos Complejos del Ministerio Público de la Acusación (MPA). La misma pretende echar luz sobre “una serie de interrogantes”,que surgieron a raíz de declaraciones públicas e información publicada en distintos medios de la provincia en la que se hacía referencia a la existencia de una suma millonaria en dólares dentro de la agencia, cifra la cual hasta el momento no fue confirmado por ninguna fuente oficial.