Dramática situación vivió esta madrugada una pareja en momentos que circulaban con su vehículo particular por la avenida de Circunvalación Oeste y fueron blanco de un criminal ataque a tiros.
Dramática situación vivió esta madrugada una pareja en momentos que circulaban con su vehículo particular por la avenida de Circunvalación Oeste y fueron blanco de un criminal ataque a tiros.
La violenta escena ocurrió en los primeros minutos del miércoles cuando Norma Flores (47) culminó su turno en la planta de reciclaje de residuos, ubicada a la vera del citado corredor vial, y emprendía el regreso a su domicilio junto a su esposo, Raúl Juárez (45).
El matrimonio circulaba a bordo de un Peugeot 206 de color gris y al pasar por el puente para retomar el carril que tiene sentido hacia el norte, observaron la presencia de un hombre que iba caminando al costado del camino.
En principio nada le llamó la atención. Sin embargo, segundos después el solitario caminante extrajo de entre sus ropas un arma de fuego y efectuó varios disparos contra el auto en el que se desplazaba la pareja.
Uno de los balazos rompió el vidrio del lado derecho del vehículo (el del acompañante) y lesionó a la señora Flores en su ojo derecho. A su vez Juarez resultó con una herida a la altura del cuello, lado derecho.
En medio del estupor por lo sucedido, las víctimas aceleraron y continuaron su marcha hasta llegar al cruce con Teniente Loza donde pidieron auxilio a policías que estaban en un patrullero.
Los esposos fueron trasladados hasta el hospital Iturraspe donde personal médico procedió con las curaciones del caso.
De todo lo acontecido fue informada la fiscal en turno quien dispuso se comisionen los peritos al lugar y se inicie la investigación pertinente para dar con el autor de los disparos.
Antecedente
No es la primera vez que los alrededores del relleno sanitario son escenario de un hecho delictivo.
El 18 de mayo El Litoral dio cuenta del caso de Susana Ortega (41), quien fue víctima de un violento atraco en el mismo sector.
La mujer, que cursa un embarazo, fue sorprendida por delincuentes que le apuntaron con un arma a su panza y gatillaron dos veces. Por fortuna el disparo no salió. Los rufianes le robaron su moto y huyeron.
Susana Ortega (41) es una de las tantas y esforzadas trabajadoras que allí realizan la selección y clasificación de residuos sólidos.
"Eran unos pibitos de entre 10 y 11 años. Al verlos lo primero que pensé es que estaban 'gomereando' a los árboles. Pero no…, segundos después salió de atrás de los yuyales un muchacho de unos 20 años, el que estaba con un arma de fuego", dijo Susana a El Litoral.
La semana anterior asaltaron a una señora que también trabaja en la planta recicladora. La sorprendieron en la misma zona donde me asaltaron a mí. Se ve que (los delincuentes) tienen el terreno estudiado", cerró.