En la jornada de este lunes se produjeron tres intentos de estafas telefónicas en el departamento San Justo de la provincia de Santa Fe, uno de los cuales se concretó.
Dos vecinas de San Justo y otra de Videla recibieron llamados en sendos intentos de estafa. Una de las mujeres entregó sus ahorros. La policía investiga lo sucedido.
En la jornada de este lunes se produjeron tres intentos de estafas telefónicas en el departamento San Justo de la provincia de Santa Fe, uno de los cuales se concretó.
Por lo que pudo averiguar El Litoral, dos de los hechos ocurrieron en la cabecera del citado departamento y el otro en la localidad de Videla. Alrededor de las 6, una vecina de 88 años recibió un llamado de una voz femenina que decía ser su hija.
La mujer le decía a la señora que la estaban asaltando y le pedían dólares. Con buen tino, la vecina cortó la comunicación y de inmediato hizo la denuncia a la Central de Emergencias 911 . Luego llamó a su hija y constató que todo era mentira.
Una hora más tarde, alrededor de las 7, otra vecina (85) de San Justo recibió un llamado. En esta oportunidad, del otro lado del “tubo” había un individuo que dijo tener a una hija secuestrada.
El sujeto le dio certeras indicaciones a la víctima para dejar el pago del rescate en un punto de la localidad sanjustina. La vecina se acercó hasta ese punto y dejó sus ahorros en dólares. Se supo que la policía pudo avanzar en la investigación de este caso.
El tercer y último llamado lo recepcionó una vecina de Videla. La comunicación la protagonizó un hombre que se hizo pasar por el hijo de la mujer. Según consta en la denuncia, el sujeto habría expresado que cuatro ladrones ingresaron en la casa y pedían un rescate en moneda extranjera.
Al igual que el primer caso, la mujer atinó a cortar la llamada y de inmediato se puso en contacto con su verdadero hijo; para luego constatar que había sufrido un intento de estafa, conocida como “cuento del tío”.
Qué hacer
La estafa telefónica es un delito en crecimiento en los últimos tiempos en Santa Fe. Se registraron diversas modalidades de engaño. El delincuente se hace pasar por un familiar que está siendo víctima de un delito, ya sea un robo o un secuestro y entablan un diálogo realizando preguntas que les sirve para recabar datos. O bien, el ladrón se hace pasar por una empresa o banco y hace creer a la víctima que es beneficiaria de un premio o algo similar.
Especialistas aconsejan que si se recibe un llamado de este tipo, se mantenga la calma y no se brinde ningún dato o información a la persona que lo está llamando, sobre ningún tema y menos sobre familiares que estuvieran ausentes en ese momento.
En segunda instancia, se recomienda cortar la llamada y contactarse inmediatamente con el familiar que no está en la casa y que supuestamente está "secuestrado" o siendo víctima de un hecho ilícito.
En tercer lugar, comunicarse con el 911 o con la comisaría del barrio para denunciar lo sucedido ante la policía.