Miércoles 11.5.2022
/Última actualización 22:24
Este miércoles por la mañana, la dueña de la estética sanjuanina donde se sospecha que se explotaba sexualmente a las empleadas y su hija fueron formalmente acusadas por el delito de promoción a la prostitución. Sin embargo, esa no fue la primera vez que las mujeres que quedaron en libertad se vieron involucradas en un procedimiento judicial, ya que en el pasado encarnaron al menos dos escándalos policiales.
Según consta en los registros, Natalia María Pablo, la hija de Patricia Coria, protagonizó un violento episodio en febrero de 2021 cuando su propia madre la denunció ante las autoridades por lesiones leves.
En esa oportunidad, fue Flagrancia la que intervino en el hecho puesto que la esteticista y maquilladora profesional había llamado a la Policía por supuestas agresiones que recibió de parte de la joven. Coria contó que el hecho de violencia sucedió cuando la hija la golpeó y le provocó heridas en el rostro, por lo que los efectivos policiales se llevaron detenida a la denunciada.
A los días, en la audiencia de la justicia exprés, Pablo fue sobreseída, aunque el juez que intervino le dictó la exclusión del hogar -ya que madre e hija convivían- y ordenó una restricción de acercamiento y de impedimento de contacto.
A la vista está que ese incidente no fue suficiente para romper la relación entre Coria y su hija, puesto que meses después retomaron el vínculo y hasta comenzaron a trabajar juntas en la estética ‘Eros For Men’. Ahora, es por la actividad que se realizaba dentro de ese comercio (presunta promoción de la prostitución) que ambas están en la mira de la justicia.
El otro escándalo con tinte policial que las involucró fue el que, precisamente, tuvo a Coria como víctima de violencia de género. Fue cuando la empresaria denunció a su ex pareja, el reconocido astrónomo Orlando Hugo Levato.
En octubre de 2020, el investigador de renombre que había sido denunciado unos meses antes por Coria fue condenado por Flagrancia a 8 meses de prisión condicional por el delito de lesiones agravadas por ser cometidas en contexto de violencia de género y desobediencia a una orden judicial (no se podía acercar).
Sin embargo, ese castigo no habría sido la única novedad del caso, sino que también lo fue la detención porque a los dos días de conocer la sentencia, Levato incumplió la orden judicial –una vez más- y por eso fue detenido.
Coria había alertado a la Brigada de Delitos, cuando lo vio pasar en su automóvil por la puerta de su casa y, a consecuencia, el astrónomo fue a parar a la Central de Policía. Después de ese evento, no hubo ninguna novedad hasta la denuncia que radicó una joven de 19 años que trabajaba para la esteticista.
Si bien madre e hija quedaron en libertad, fueron imputadas como autora y coautora –respectivamente- por un delito que prevé una pena que va de 4 a 6 años de prisión.