Después del derrumbe, comenzaron los peritajes por el incendio en la distribuidora de Santa Fe
"Las tareas periciales están bastante avanzadas", confirmó el comisario Fernando Gamba, subjefe a cargo del cuartel de Bomberos de Santa Fe durante la emergencia del jueves pasado. El dato más importante: "No hubo que lamentar víctimas", dijo.
Después del derrumbe, comenzaron los peritajes por el incendio en la distribuidora de Santa Fe
Una semana después de ocurrido uno de los incendios más grandes registrados en la capital provincial, el subjefe del Cuartel de Bomberos Zapadores de Santa Fe, comisario Fernando Gamba, hizo un repaso sobre las tareas realizadas en las horas críticas y adelantó en qué consisten las medidas que restan para conocer qué fue lo que ocurrió en la empresa que ocupaba prácticamente una manzana, en el corazón de barrio Don Bosco.
"El jueves 5 (de enero) aproximadamente a las 13.40 se desarrolló un incendio en la Distribuidora del Interior donde en primera instancia fue gente del cuartel Santa Fe", introdujo el comisario de 50 años, que durante toda la jornada y hasta el día siguiente, estuvo al frente de más de 60 hombres y mujeres que trabajaron en la extinción del fuego.
"No hubo que lamentar víctimas graves", destacó el subjefe del Cuartel de Bomberos Santa Fe, Fernando Gamba. Crédito: Pablo Aguirre
"Después se acercaron desde el cuartel Zona Norte y casi en simultáneo llegaron desde el cuartel Santo Tomé y los Bomberos Voluntarios de Las Flores. También trabajaron bomberos de San Carlos, Coronda y Sauce Viejo; y además hubo intervención de vehículos de Aguas Santafesinas, de la Municipalidad y del 107 Emergencias", detalló.
Peligro de derrumbe
A ojo de buen cubero, Gamba estimó en más de medio millón de litros de agua utilizados para mitigar el foco. "Se trabajó prácticamente 12 horas sin interrupción, porque recién a la noche estuvo controlado el incendio", explicó.
En cuanto a la forma de abordar el siniestro, el especialista distinguió que "se atacó en forma directa la parte del tinglado que se había venido abajo y en forma indirecta la estructura que quedó armada que es la que estaba en Estanislao Zeballos y Gobernador Freyre".
A propósito de ésta última, "en la esquina había quedado muy debilitada la estructura por la acción del fuego, que deteriora la estructura molecular del hierro y lo hace mucho más blando y por eso aparece el peligro de colapso y así lo demostraban las rajaduras que se veían desde afuera". De hecho "terminó por colapsar el lunes a la mañana por sí sola y el martes estaba prácticamente demolida", gracias a la intervención de maquinaria pesada utilizada para la remoción de escombros.
Cisterna
"El camión cisterna de Aguas Santafesinas cargó en 9 oportunidades los 8 mil litros que tiene de carga", informó el vocero de la empresa Germán Nessier. La labor se extendió "desde las 14 del jueves, hasta las 6 de la mañana del viernes", puntualizó. En ese lapso ASSA abasteció a los bomberos con "más de 56 mil litros de agua", según estimaciones propias.
El número
570.000 Litros de agua se utilizaron para apagar el incendio si se suman las 50 cargas de cubas de 10.000 Lts. (500.000), más las 20 recargas de autobombas de 3.500 Lts. (70.000), sin contar las recargas de los vehículos livianos llamados de 'Combate 500'.
Ubicación
Don Bosco. El incendio se desató sobre la calle Estanislao Zeballos al 3400 y afectó una parte de la manzana que rodean las calles Gobernador Freyre (al oeste), Juan Castelli (al sur) y San Lorenzo (al este), del barrio Don Bosco.
-¿Qué tareas restan por desarrollar en ese lugar por parte de Bomberos?
-Ahora se está desarrollando todo lo que es peritaje. Están bastante avanzadas las tareas periciales pero no tenemos la confirmación.
-¿Qué había en el tinglado?
-Todos elementos de limpieza, había desinfectantes, desodorantes, cloro, pañales, toallitas de higiene personal…
-¿Y todavía no se conoce el origen del foco?
-Sí, la causa del incendio está circunscripta al galpón, la causa está avanzada, pero nosotros no podemos por cuestiones legales adelantarnos a publicar o dar opiniones sobre la causa.
-¿A la hora del incendio la empresa estaba funcionando con gente adentro?
-Así es. La distribuidora trabajaba con horario corrido hasta las 18 horas. En ese momento en que se produce el incendio era una especie de recreo que hacen los empleados y uno de ellos escucha ruidos en el galpón y cuando ingresa encuentra una torre de pallets prendida fuego completamente. Allí empiezan las alarmas y tratan de apagarlo por sus propios medios, pero no logran hacerlo porque eso se expande rápidamente y el humo, que es el mayor asesino, en seguida enceguece y asfixia a las personas que estaban en el interior del galpón así que tuvieron que salir inmediatamente.
-¿Cuánta gente había dentro del edificio y cuánto tiempo llevó evacuarlos?
-No tengo precisión de la cantidad de empleados en ese momento, pero sí que pudieron salir todos por sus propios medios y no hubo mayores lesionados.
-¿Hubo que asistir a vecinos, bomberos o terceros que hayan trabajado en el incendio?
-No hubo que lamentar víctimas graves, únicamente un bombero que se clavó un hierro en el estómago producto de una caída y otros que tuvieron que ser asistidos por el tema de inhalación de humo, pero mayormente no hubo lesionados.
-¿Cuántos litros de agua se utilizaron?
-Nosotros tenemos camiones cubas que llevan 10.000 litros de agua que hicieron unos 50 viajes; a eso hay que sumarle las autobombas que llevan 3.500 litros de agua y se vaciaron 20 aproximadamente; después hay vehículos menores, llamados de 'Combate 500' (2 en Santa Fe, 1 en Santo Tomé y 1 de Zona Norte) que se reabastecían permanentemente, pero si bien no le puedo dar un cálculo certero estaríamos hablando de miles de litros.
Más de 60 hombres y mujeres de bomberos Zapadores y Voluntarios trabajaron en el combate de las llamas. Crédito: Guillermo Di Salvatore
-¿Cuánta gente trabajó en relación directa con Bomberos?
-En cuanto a bomberos, trabajaron cuatro dotaciones del Cuartel Santa Fe (dos del cuartel Central, uno de Santo Tomé y uno en Zona Norte) y Voluntarios de San Carlos, Coronda y Sauce Viejo con 6 hombres por dotación, por lo que estamos hablando de más de 60 hombres y mujeres en las primeras horas, porque después hubo relevos.
-¿Tuvieron temor que el incendio se expanda a las propiedades vecinas?
-Había explosiones de aerosoles pero no ofrecían peligro de propagación hacia el lado de la estación de servicios (ubicada una cuadra al este). Sí en un principio la radiación calórica afectó el aislamiento de los cables que se encontraban enfrente de la distribuidora, por eso muchos vecinos tiraban agua en el frente de sus casa porque pensaban que se les iban a prender fuego las puertas. Y la EPE cortó el suministro porque los cables entraron en corto porque perdieron el aislamiento plástico.
-¿Es la primera vez que trabaja en un siniestro de esta magnitud?
-No, ya hubo anteriores muy grandes. Hace 25 años que soy bombero. Estuve en el Cuartel de Vera dos años y medio; después en el de Santo Tomé, en Zona Norte, Rincón, el Túnel Subfluvial y ahora acá.
-Bueno el de la pinturería de Facundo Zuviría en 2018 fue muy grande también. Y generalmente se trabaja en conjunto cuando el incendio supera la respuesta que puede dar el cuartel Santa Fe, entonces se convoca a bomberos de otras localidades. Pero nunca va a quedar descuidada la ciudad por más grande que sea la intervención.
Nueva subestación de la EPE
Uno de los factores críticos del incendio en la distribuidora fue el riesgo eléctrico, por lo que la Empresa Provincial de la Energía debió interrumpir el servicio durante las primeras horas, lo cual afectó a comercios y viviendas de las inmediaciones.
Pero además, por efecto directo de las llamas "colapsó una subestación transformadora" emplazada en la esquina de Estanislao Zeballos y Gobernador Freyre, lo cual implicó "la salida de servicio de dos distribuidores de media tensión", estrictamente "por razones de seguridad", explicó el vocero de la EPE, Hugo Ceré.
Operarios de la EPE construyeron "en tiempo récord" una subestación transformadora que reemplazó a la que colapsó producto del fuego. Crédito: Prensa EPE
"También se vio dañado parte del tendido de preensamblado, asociado a las instalaciones de la mazana del comercio" -explicó Ceré-, por lo que "la empresa debió seccionar un cable subterráneo que justamente iba por la vereda de calle Gobernador Freyre y lo aislaron para poder reconectar los dos distribuidores a partir de las 19.30 del jueves".
"A su vez, el viernes a la tarde comenzamos con la construcción de una nueva subestación transformadora que reemplazó a la que colapsó y que conectamos el sábado a la mañana", informó el portavoz de la EPE.
La nueva obra "está en diagonal de la que estaba en la esquina de Gobernador Freyre y Estanislao Zeballos". "La construyeron en tiempo récord", destacó Ceré tras informar que "el sábado al mediodía entró en servicios". Además, explicó que "hubo un reconfiguración de la red de baja tensión porque esa subestación alimentaba aproximadamente a unos 200 usuarios" de la zona.