La pieza que faltaba para comenzar a finiquitar la trama narco que escandalizó a la policía en las últimas semanas, finalmente fue encontrada. Es que D. C. S. fue detenido este martes por la noche en un departamento ubicado en la Avenida Leandro Alem de la ciudad de Santa Fe por personal de la Policía Federal, acusado de ser narcotraficante.
El individuo era intensamente buscado en dos momentos: primero, luego de un llamado anónimo y del envío de videos en junio a las fuerzas de seguridad, en el cual indicaban que había un narco en particular que era amparado por policías de la Brigada Antinarcóticos y, segundo, luego de un allanamiento en Castelli al 4300 en Santa Fe, en julio, tras una denuncia por violencia de género que una mujer radicó contra quien era su pareja. Es que no solamente lo acusó de golpeador, sino que facilitó pruebas acerca de que el individuo era narcotraficante. Esa evidencia consistió en una pistola, un fusil, unos 500 proyectiles, dos miras telescópicas, cocaína y marihuana, dos balanzas y dinero en efectivo.
Mirá tambiénEl jefe de la Brigada de Drogas de Esperanza será indagado este martesA partir de allí y en hermetismo total, la Justicia Federal tomó la investigación que encontró una primera respuesta el 31 de julio cuando en la sede de la Jefatura de la Unidad Regional XI con asiento en Esperanza la Policía Federal detuvo a L. G. N., entonces jefe de la Brigada Antinarcóticos de Las Colonias, y en Laguna Paiva al suboficial –en disponibilidad en ese momento-, M. C., ambos acusados e investigados por supuestamente colaborar a cambio de dinero con la protección de ese narco detenido este martes.
Por otra parte, el día 4 de agosto en la Jefatura de la Unidad Regional XV con sede en Coronda fue detenido el Jefe de la Brigada Antinarcóticos del departamento San Jerónimo, también acusado de ser parte del escudo protector del narcotraficante.
Mirá tambiénAhora detuvieron al jefe de Drogas del departamento San JerónimoLos tres fueron imputados por supuesta malversación de fondos públicos, encubrimiento triplemente agravado e incumplimiento de los deberes de funcionario público. De hecho, al menos L. G. N., corondino, y M. C., paivense, fueron alojados este miércoles por la mañana en el Pabellón 14 de la Cárcel de Coronda por orden de la Justicia Federal e ingresados en móviles de la PFA, en un sector con internos que tienen causas federales pendientes.
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