Juliano Salierno / Joaquín Fidalgo
Es presidente del club Defensores y de la empresa de TV por cable del distrito costero. Lo acusan de ser uno de los narcotraficantes más importantes de la ciudad.
Juliano Salierno / Joaquín Fidalgo
“No sólo estaba en el tema drogas... él ‘administraba’ la violencia en toda la zona”, deslizó por lo bajo uno de los investigadores. Hablaba de Sergio Villarroel, un personaje de 55 años muy conocido en Alto Verde, su barrio, donde es más conocido por su apodo: “Zurdo”. Este hombre -una especie de caudillo para muchos vecinos- y algunos de sus familiares y allegados fueron arrestados esta madrugada, en el marco de una importante y extensa investigación llevada adelante de manera conjunta por fuerzas provinciales y federales.
Las detenciones se produjeron hoy, pero todo comenzó a gestarse hace más de dos años. En un principio, la Justicia le dio la responsabilidad a personal de Gendarmería, pero luego las actuaciones pasaron a un equipo que conformaron la Dirección Provincial de Prevención y Control de Adicciones, la Prefectura Nacional y la Policía Federal.
De manera simultánea, equipos tácticos de irrupción allanaron en total 20 inmuebles de distintos puntos de nuestra ciudad, San José del Rincón y Laguna Paiva (ver nota aparte).
El “líder”
En Alto Verde fueron apresados Villarroel -de perfil muy bajo y prácticamente nula exposición pública- y su esposa, de 38 años. Personal del Grupo de Acción Táctica de la provincia los sorprendió cuando dormían en su casa, ubicada en el ingreso a ese distrito costero, a la vera de la medular avenida Demetrio Gómez.
Los uniformados debieron ocuparse previamente de dominar a las mascotas de la familia, dos rottwailer que custodiaban el patio. “No fue necesario ejercer violencia contra los perros. Los controlamos sin lastimarlos”, aseguró uno de los hombres que actuó. Para ello contaron con la colaboración de personal especializado.
Los detenidos no ofrecieron ningún tipo de resistencia, ni tampoco sus vecinos, algunos de los cuales -al observar lo que ocurría- desde una distancia considerable sólo gritaron insultos y amenazaron con lanzar piedras contra los patrulleros.
A escasas cuadras de ese lugar, también fueron allanados el local de la empresa de televisión por cable de ese distrito -de la que Villarroel es titular- y otros tres inmuebles linderos, también protegidos por un can de la misma raza.
El operativo fue mantenido en el más estricto secreto hasta último momento. Ni siquiera quienes participaron de las irrupciones sabían dónde iban a hacer los allanamientos. Antes de partir hacia Alto Verde, en plena madrugada, todos sus teléfonos celulares fueron secuestrados, para evitar posibles filtraciones y garantizar el factor sorpresa. Debido a la importancia del operativo, el ministro de Seguridad de la provincia, Maximiliano Pullaro, estuvo presente siguiendo los procedimientos.
En los distintos procedimientos fueron arrestados además dos sujetos que serían “laderos” o “socios” del “Zurdo” y otros cómplices de menor jerarquía dentro de la presunta banda narco. También se secuestraron importantes cantidades de cocaína y marihuana, poderosas armas de fuego con municiones, un handy, teléfonos celulares, anotaciones, más de 200 mil pesos en efectivo y documentación de suma importancia para la causa, entre otros elementos.
La causa
La investigación judicial estuvo a cargo del ex fiscal de Santa Fe, Walter Rodríguez, quien ocupó ese puesto hasta fines de marzo de 2016, cuando fue reemplazado por el entonces fiscal de Rafaela, Claudio Kishimoto. Rodríguez fue quien antes de su partida, dejó las tareas de inteligencia a cargo de la Dirección General de Prevención y Control de Adicciones de la provincia, junto con Prefectura Naval delegación Santa Fe.
Los avances en la investigación permitieron a su reemplazante Kishimoto solicitar al juez federal N° 2, Francisco Miño, la realización de varias decenas de allanamientos, de los cuales 20 se materializaron este sábado.
>>> 20 allanamientos
Bunkers, quintas y oficinas
J.F./J.S.
Alrededor de 300 hombres de fuerzas federales y provinciales fueron desplegados en veinte domicilios de las ciudades de Santa Fe, San José del Rincón y Laguna Paiva, con el fin de desarticular una organización delictiva cuyo núcleo duro está en el distrito costero de Alto Verde, en cabeza del empresario y dirigente deportivo, Sergio Villarroel (“Zurdo”) y su entorno más cercano.
Del total de los allanamientos la delegación local de la Policía Federal Argentina realizó ocho, la mayoría de los cuales estuvo orientada a derribar bunkers de venta de droga en el norte de la ciudad. El eje estuvo en tres domicilios del barrio Cabal, en una casa, un galpón y un depósito de la calle Obispo Boneo al 5400, donde fue apresado uno de los laderos y lugarteniente del “Zurdo”, José Luis G. Además, irrumpieron en domicilios de Rivadavia al 9200, Fonavi Don Bosco, 12 de Infantería y avenida Peñaloza, Alfonsina Storni al 3000 y en la ciudad de Laguna Paiva.
La Delegación de Inteligencia de Prefectura Naval con sede en Santa Fe realizó seis allanamientos, los cuales se concentraron en oficinas y locales comerciales donde se presume, se realizaba el blanqueo del dinero obtenido de la venta de estupefacientes. Un estudio contable de bulevar Gálvez al 1700, a metros de calle Necochea, era la pantalla donde se realizaban operaciones inmobiliarias; al igual que una vivienda de calle Sargento Cabral al 1800, donde funcionaba una concesionaria de autos con el mismo fin y donde fue alcanzado el otro socio de Villarroel, un tal Cristian G. También dos pollerías en Castelli al 3600 y avenida General Paz al 5700; y otras dos viviendas de Pasaje Echevería al 6400 y en la Manzana 13 de Alto Verde.
Los seis allanamientos restantes estuvieron a cargo de la Sección Inteligencia centro-norte de la Dirección General de Prevención y Control de Adicciones de la provincia. Cinco de ellos fueron en Alto Verde: la casa del capo narco, la oficina del cable video, y otros tres lugares ubicados en los alrededores, sobre la avenida Demetrio Gómez. Por último una casaquinta de Villarroel ubicada en calle Del Sol al 3100, en el barrio Villa California, de San José del Rincón. Allí la fuerza provincial secuestró más de un kilo de cocaína pura.