Germán de los Santos
sucesos@ellitoral.com
Corresponsalía Rosario
Los Funes y los Caminos son protagonistas de una guerra en los barrios Municipal, La Tablada y República de la Sexta.
Germán de los Santos
sucesos@ellitoral.com
Corresponsalía Rosario
Los enfrentamientos entre dos familias de la zona sur de Rosario, los Funes y los Caminos, ambos ligados a una trama de narcotráfico y barrabravas, volvieron a encenderse tras una seguidilla de muertes de ambos bandos.
Hace tres días Alan Funes, prófugo con pedido de captura nacional e internacional, profetizó que iba a matar “a todas las generaciones” de los Caminos, sus rivales, históricamente ligados al narcotráfico y a la barra brava de Newell’s en Rosario. Sus amenazas, escritas en su perfil de la red social desde la clandestinidad fueron fruto de la rabia y la sed de venganza de este joven tras el crimen de su hermano Ulises, a quien le acribillaron desde un auto el 6 de diciembre pasado.
El domingo pasado se escribió otro capítulo en esta novela negra que tienen a las calles de las zonas sur y oeste de Rosario como escenario. Desde un VW Surán mataron Marcela Díaz, hermana de Ariel Segovia, alias Tubi, miembro de la banda de los Caminos, que desde siempre mantuvieron estrechos vínculos con Los Monos y lideraron la barra de Newell’s. Tubi Segovia era uno de los candidatos impulsado por los Cantero para liderar la tribuna leprosa, pero un ataque en su contra lo sacó de circulación. Y al ser hospitalizado quedó preso por el crimen de una joven, Lorena Ojeda.
Testigo vivo
Durante la tarde de ayer se produjo otro crimen de tinte mafioso. Leandro Rafatti, de 29 años, condenado a 4 años de prisión por portación ilegal de arma de guerra, fue asesinado desde un auto en la zona sur de Rosario. A pocas cuadras del asesinato la policía detuvo a dos personas en un Peugeot 206. A uno de los supuestos atacantes le incautaron una pistola 44 Magnun.
Marcela Díaz iba en una moto acompañada por un joven cuando fueron atacados. Ella murió en el acto y él fue herido en una pierna pero sobrevivió al tiroteo. Este hombre declaró a la policía que identificó a Alan Funes entre los ocupantes del auto.
El 3 de enero pasado, Alan Funes festejó fin de año disparando 15 tiros al aire, mientras se encontraba con prisión domiciliaria. El video de los disparos se difundió por las redes sociales. Y al otro día cuando la policía lo fue a buscar se fugó. Estaba preso en su casa porque está imputado del crimen de Julio Solaro, alias ‘Pupi‘, quien fue acribillado el 1º de mayo de 2016 en un pasillo de Ayacucho al 4300. Está imputado de ese hecho cuando tenía 17 años. Ese crimen se habría producido como venganza de la muerte de la madre de Alan Funes, Mariela Griselda Miranda, quien fue atacada a tiros desde una moto.
Prometieron vengarse
Tras otro crimen contra un familiar, como su hermano Ulises, de 18 años, Alan Funes y su hermano Lautaro, quien está preso en la cárcel de Piñero, a unos 25 kilómetros de Rosario, lanzaron crudas amenazas desde Facebook, como publicó este diario.
Lautaro, quien está detenido desde mayo pasado tras un megaoperativo que hizo la Policía Federal, prometió matar a todas las generaciones de los Caminos. ‘La guerra va a terminar cuando los mate a todos, hasta la generación más chica‘, posteó en Facebook desde su calabozo.
Alan hizo lo propio. “Uno por uno los voy a matar. Por qué no me vienen a buscar a mí, que me mandan en cana con la yuta, la única forma que tienen para sacarme de la calle porque no les da”.
Esta saga sangrienta entre los Funes y Caminos ya dejó más de 30 muertos en los últimos 20 meses los barrio Municipal, República de la Sexta y La Tablada, en la zona sur de Rosario.
La ministra de Seguridad de la Nación, Patricia Bullrich, admitió en el programa de Mirtha Legrand que hay “nuevas familias que se disputan el territorio”. “Los Monos están todos presos; ahora salieron unas banditas de chicos jóvenes, están naciendo dos familias nuevas que se quieren disputar el territorio pero ya estamos trabajando para que no crezcan”.