Por Carlos Retamal
El dato fue revelado por la fiscal Marisol Fabbro durante la audiencia al marido de la víctima, quien quedó preso junto a su amigo, que lo ayudó a tapar las pruebas.
Por Carlos Retamal
La fiscal Marisol Fabbro imputó a Gregorio Britez el homicidio doblemente calificado por el vínculo y femicidio en contexto de violencia de género de su esposa, Nora Escobar, cuyo cuerpo fue encontrado enterrado en el patio de la vivienda donde residía en hombre, ubicada en el barrio Martín Fierro de Granadero Baigorria.
Durante la audiencia imputativa realizada en la tarde de este viernes 13 de mayo, la fiscal dijo que en principio el asesinato de Nora se llevó a cabo en la noche del 22 de abril, en el interior del domicilio ubicado en calle Liniers 1781 de Granadero Baigorria.
Para acabar con la vida de Nora, que tenía 42 años, se valió de una cuchilla de al menos 5 centímetros de ancho con la cual le asestó 17 puñaladas, cuatro de ellas en zonas letales: en el corazón, el hígado, la tráquea y el pulmón y entre 5 y 6 en la zona de la espalda, “provocando su deceso por lesiones cardiopulmonares graves por múltiples heridas de arma blanca”, remarcó a fiscal.
Tras esto, hizo una excavación en el patio trasero de su vivienda, “una cavidad semejante a una fosa, para luego arrojar allí el cuerpo sin vida de la víctima y enterrarlo, y con el objeto de evitar cualquier filtración a la superficie, construyó un cerramiento mediante la elaboración y colocación de una loza de aproximadamente 60 centímetros de ancho y dos metros de largo por encima del cadáver, y otra losa de igual tamaño, de colocación vertical subterránea, a un costado del cadáver”, agregó.
Mientras que al amigo de Britez, Alberto Lipari, le atribuyó haber colaborado con Britez “a fin de ocultar, alterar y hacer desaparecer los rastros, pruebas e instrumentos del delito” y que para eso usó su auto, un Renault 6, en el que retiró pertenencias con manchas de sangre del domicilio de calle Liniers con posterioridad al homicidio.
La fiscal mencionó que vecinos de la zona dijeron haberlo visto hacer al menos 3 viajes con su auto el día 23 de abril (se presume que el día después de cometido el femicidio) y que también se lo vio en la casa el domingo pasado. También le atribuyó al amigo de Britez haberlo ayudado en la confección de la fosa y en la limpieza de la vivienda.
“Es imposible que Britez haya podido, dada su edad, contextura física y estado físico, no solo enterrar el cuerpo sino también realizar toda una carpeta de concreto sobre ese patio, limpiar toda la casa y arreglar las paredes y pintarlas en forma completa”, sostuvo Fabbro.
Y también que le brindó ayuda económica a Britez para que intentara fugarse al exterior, algo que estuvo a punto de lograr, ya que fue apresado por personal de Gendarmería Nacional cuando intentaba salir por el puesto fronterizo ubicado en Posadas, provincia de Misiones, con rumbo a Encarnación, Paraguay.
La fiscal Fabbro pidió que el amigo de Britez sea imputado por encubrimiento agravado por hecho precedente (homicidio doblemente calificado por el vínculo y violencia de género).
El juez de 1ª Instancia, Hernán Postma, hizo lugar a la medida cautelar presentada por la Fiscalía para ambos imputados y dictó la prisión preventiva efectiva por el plazo de ley (2 años).
Cabe recordar que Gregorio Britez fue atrapado en la tarde del miércoles 11 de mayo cuando estaba haciendo los papeles para cruzar desde Misiones a Paraguay. El cuerpo de Nora había sido hallado en la vivienda donde residía Britez, y que durante mucho tiempo compartió con quien era su esposa, Escobar.
El cadáver fue hallado bajo un contrapiso de material que había sido colocado unos pocos días antes, a una profundidad de 80 cm del nivel del suelo, en un sector del patio ubicado en la parte trasera de la casa
La búsqueda de Nora la había comenzado su hija Karen, quien denunció en redes sociales su desaparición el 23 de abril. Además, la última semana de ese mes hizo una denuncia por la desaparición de su madre en la comisaría 24ª de Granadero Baigorria. El pasado viernes 5 se llevó a cabo un allanamiento en la casa de calle Liniers, donde residía Britez, pero en esa inspección no se halló nada que orientara a los investigadores sobre lo que había ocurrido.
En la mañana del lunes 9, Karen hizo la denuncia en la Fiscalía Regional Segunda de Rosario. Y al atardecer de ese día, vecinos y allegados realizaron una marcha y corte de avenida San Martín (ruta nacional 11) y Eva Perón, a metros del ingreso al hospital de Granadero Baigorria, para pedir que se la buscara en forma urgente.
El lunes se emitió una búsqueda de paradero de Nora, cuyo cuerpo fue hallado en la noche del martes, cuando se hizo un segundo allanamiento en la vivienda ubicada al sudoeste de Granadero Baigorria.