El hombre señalado como el femicida de Vanesa Troncoso, la joven que fue abusada y asesinada en su casa de barrio Punta Norte el pasado sábado 7 de septiembre.
Se trata de Mario Andrés Cena, cuñado de la víctima, quien cumplió condena por abusar de ella.
El hombre señalado como el femicida de Vanesa Troncoso, la joven que fue abusada y asesinada en su casa de barrio Punta Norte el pasado sábado 7 de septiembre.
Mario Andrés Cena, de 34 años, fue imputado como autor del delito de “femicidio” (homicidio doloso agravado por haber sido cometido por un hombre contra una mujer mediando violencia de género).
La prisión preventiva fue dispuesta por el juez penal Lisandro Aguirre durante una audiencia realizada el viernes por la tarde en los tribunales de la capital provincial.
La investigación se encuentra en manos del fiscal Matías Broggi, quien imputó a Cena y solicitó la cautelar de máxima. “El magistrado valoró las evidencias que presentamos e hizo lugar a nuestro pedido”, destacó.
“En línea con lo que planteamos desde la fiscalía, el juez entendió que estaban latentes los riesgos procesales”, sostuvo Broggi y agregó que “consideró que, en caso de que hubiera recuperado la libertad, el imputado podría haber entorpecido el proceso o fugarse para sustraerse del proceso judicial iniciado en su contra”.
Cena conocía a Vanesa desde que ella era pequeña. Cuando su cuñada tenía apenas 11 años, la violó, y por eso fue condenado a 15 años de prisión. Sin embargo, la Cámara de Apelaciones revisó ese fallo, quitó agravantes y bajó la condena a 10 años.
Durante la década que pasó tras las rejas, Cena continuó en contacto con la hermana de Vanesa y se convirtió a un culto religioso. Cuando recuperó su libertad en 2023, el exconvicto continuó su relación con la familia de su víctima.
De hecho, momentos antes de que ocurriera el crimen de Vanesa el sábado 7 de septiembre, Cena pasó por la vivienda a buscar a la madre de ella para llevarla a un encuentro religioso.
Momentos más tarde, según pudo reconstruir la fiscalía, Cena regresó a la vivienda ubicada en inmediaciones de Pasaje José Doldán y Arenales de barrio Punta Norte, donde sólo había quedado Vanesa.
Allí, “la inmovilizó y abusó sexualmente de ella”, relató el fiscal durante la audiencia de medidas cautelares. Luego, “con la intención de provocarle la muerte, usó una toalla para asfixiarla”.
Broggi señaló que “si bien la mujer gritó para pedir ayuda, la presión que ejerció el imputado con la toalla en el cuello de ella, terminó provocándole la muerte”.
“Luego de haber consumado el femicidio, y ante la llegada de vecinos que consultaban por la víctima, el imputado les dijo que ella no estaba en la casa y se fue en una moto”. Pero “antes de escapar de la vivienda, prendió fuego al colchón en el que estaba el cuerpo de la víctima, con la intención de cubrir su accionar delictivo”.
Al ver humo salir de la casa, los vecinos violentaron una abertura e ingresaron. Uno de ellos, enfermero, constató que Vanesa tenía signos vitales muy débiles. Intentó ayudarla, pero la mujer terminó falleciendo.
Ese mismo sábado, ya por la noche, Cena fue detenido mientras intentaba ocultarse en el partido de la casa de uno de sus hermanos. Fuentes judiciales informaron que fue su pareja, la hermana de Vanesa, quien lo rastreó a través de una aplicación del teléfono celular y le indicó a la policía cuál era su ubicación.
Cena fue imputado y una semana después quedó en prisión preventiva por orden del juez Aguirre. Permanecerá tras las rejas mientras la investigación avanza.