Danilo Chiapello | [email protected]
El macabro mensaje pertenece a dos alumnos de la escuela Alte Brown. Anoche se viralizó por Whatsapp y causó pánico en esa comunidad educativa.
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“... cuando están todos formados sacamos las armas (1 cada 1) y empezamos a disparar. Y luego con la última bala nos matamos”, dice el texto con el cual dos adolescentes desataron anoche una situación de crisis entre autoridades, padres y alumnos de la escuela Alte Brown.
Travesura... maldad... locura. Nadie lo sabe aún.
Lo cierto es que la secuencia se inició anoche cuando se viralizó parte de una conversación que estos dos menores mantenían por el chat del servicio Whatsapp.
El macabro mensaje no tardó en llegar al conocimiento de algunos padres que, lógicamente, reaccionaron con desesperación.
No obstante, fue un llamado anónimo al servicio de emergencias 911 el que dio cuenta de la situación.
A partir de entonces, las autoridades de la Unidad Regional I dispusieron que se realice un operativo de “prevención activa” en el lugar.
“Esto significa el envío de personal uniformado y vehículos para hacer una custodia ante cualquier evento inesperado que pueda producirse”, explicó hoy el jefe de la Unidad Regional I, comisario Luis Siboldi.
A las aulas
Por su parte, el director de la escuela involucrada, Fabián Cataudela, manifestó que cuando se enteró de lo acontecido informó de la situación a las autoridades ministeriales y a la policía.
Si bien se decidió no interrumpir el dictado de clases, el único cambio para hoy en la rutina de los estudiantes consistió en no hacer la formación habitual, ingresando directamente a las aulas.
Sobre este mediodía los responsables de la institución mantenían una reunión con agentes de la Región IV.
Daño al erario público
Lo ocurrido en la escuela Alte Brown se encuadra dentro de una situación complicada para los establecimientos educativos que vienen siendo blanco de reiterados avisos falsos de amenazas de bomba.
Al respecto, Siboldi opinó que “la verdad que esto es más de lo mismo. Sólo que en este caso no se habló de una bomba sino de abrir fuego con armas. De todos modos, el objetivo final es causar conmoción”, expresó.
Más adelante, el jefe policial precisó que “ya se tiene identificado al autor del mensaje, el que quedó a disposición de la Justicia de Menores”. Según trascendió, a modo de defensa el joven habría dicho que su teléfono fue hackeado.
Por último, Siboldi fue consultado acerca de cuánto dinero le significa al Estado hacer frente a este tipo de situaciones.
“El monto es variable porque depende de qué tipo de establecimiento; de las distancias que se tengan que recorrer, de cuántos vehículos se afecten y cuántas horas hombre se ocupen, entre otros aspectos. De todos modos, debe quedar bien en claro que todo esto significa un perjuicio enorme para el erario público”, sentenció.