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Las autoridades se comprometieron a brindar los recursos necesarios para peritajes telefónicos y la geolocalización de las llamadas.
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Una nueva luz de esperanza se encendió en el caso Rosalía Jara (la joven de Fortín Olmos que está desaparecida desde el 1º de julio de 2017) luego del encuentro que mantuvieron familiares de la mujer con autoridades de gobierno.
Durante la reunión, concretada en el mediodía del martes, los funcionarios se comprometieron a brindar los recursos necesarios para realizar los peritajes telefónicos.
Entre esos trabajos se destacan las pruebas de “geolocalización”, que pueden determinar con precisión dónde estaban los teléfonos de Jara y Valdez (único detenido y principal sospechoso) cuando se realizaron las llamadas y cuándo se apagó el teléfono celular de ella.
Es un estudio que van a hacer peritos de la Universidad Tecnológica Nacional de Buenos Aires. Tienen que venir los especialistas, que van a poder precisar los puntos con un margen de error de hasta 70 metros.
Encuentro “positivo”
Mónica Pérez, tía de Rosalía, calificó al encuentro como “muy positivo” y se mostró confiada en el avance de la investigación.
En diálogo con El Litoral, la mujer expresó que “el ministro (por Pablo Farías) nos dijo que el gobernador ponía todo a disposición para que se hagan todas las pericias y lo más antes posible. Nos comentó que dio instrucciones precisas al subsecretario de Investigación Criminal y Policías Especiales, Rolando Galfrascoli, y a los fiscales para que empiecen a trabajar ya y que hagan todo lo necesario sin demoras”.
“Ellos nos dijeron que hay que poner luz sobre este tema, porque hace un año que no se resuelve y la familia sigue sufriendo. Quizás muy pronto tendremos que viajar a Buenos Aires y en ese sentido también nos dieron garantías de que se van a encargar de todos los gastos”, agregó.
Por último señaló que “en esta semana nos van a estar informando qué decisiones tomarán”. La mujer manifestó que con estos nuevos peritajes están “convencidos de que se va a abrir un manto más de luz”.
El imputado
Por su parte el abogado de la familia, Aníbal Zupel, explicó que el pedido se debe a que “en el norte, a veces no tenemos los elementos con los que se cuenta en las grandes ciudades, fundamentalmente saber las últimas horas, qué recorrido, con quién se comunicó y qué es lo que pasó con el único imputado”.
El involucrado en la causa es Juan Oscar Valdez, profesor de Educación Física de la joven en la escuela con el que mantenía una relación. El hombre de 37 años “sigue a disposición de la Justicia con una prisión preventiva sin plazo”, aseguró Zupel.
En la reunión estuvieron presentes el ministro de Gobierno, Pablo Farías; el subsecretario de Investigación Criminal y Policías Especiales, Rolando Galfrascoli; el jefe de la PDI de Reconquista, comisario Cortina; Lorena Ibarra, de Trata de Personas de Reconquista; el fiscal regional de Reconquista, Dr. Rubén Martínez, entre otras autoridades.
Y por el lado de la familia tomaron parte: Haydee Jara (prima), Rubén Jara (tío) y Fabián Jara (tío) y su esposa, Mónica Pérez.
El caso
Rosalía Daniela Jara tenía 19 años cuando fue vista por última vez, el 1º de julio, en una garita de colectivo de Fortín Olmos, pequeña localidad del departamento santafesino de Vera (en el norte provincial).
En su casa, la espera todavía su pequeña hija Alma, que en marzo cumplió tres años. La hipótesis más fuerte es que fue asesinada, pero sus allegados no pierden las esperanzas de hallarla viva.
Rosalía se mostraba muy preocupada los meses previos a su desaparición. Hasta llegó a decir a sus seres queridos, en medio de una crisis de nervios, que iba a quitarse la vida.
Hacía poco que se había separado de su pareja, quien tenía serias dudas sobre la paternidad de la pequeña Alma y había recurrido a la Justicia para comprobarlo. Incluso había pedido un estudio de ADN que, según estaba previsto, iba a realizarse el 3 de julio.
La joven sabía que su beba era hija de otro hombre bastante mayor que ella, Juan Oscar Valdez (hoy tiene 37 años), a quien conoció porque fue profesor de Educación Física suyo en la escuela, cuando completó sus estudios primarios. Él era casado, por lo que la relación entre ambos quedó en la más absoluta clandestinidad.
Algunas versiones indican que la muchacha habría sido entregada a una red de trata, por lo que se realizan trabajos de inteligencia con la colaboración de Gendarmería Nacional en las zonas aledañas y en otras provincias como Chaco y Misiones. El mayor temor de su familia es que haya sido asesinada, pero aguarda con esperanza, mientras marcha periódicamente acompañada sólo por la pequeña sociedad de Fortín Olmos.