Martín G. fue detenido el pasado jueves, en su vivienda de uno de los barrios rafaelinos (Pizzurno, en el sur de la ciudad) más acomodados, luego de las denuncias recibidas en Fiscalía Regional de parte de las madres de mujeres, algunas de ellas menores de edad, sobre las propuestas y amenazas que realizaba el joven, con el fin de someterlas y hacerlas trabajar como prostitutas en su beneficio.
El deleznable sujeto era visto con frecuencia cubriendo las reuniones de comisión y sesiones del Concejo Municipal, aduciendo que trabaja como periodista, aunque ningún medio de comunicación de la ciudad lo tiene entre su personal o colaboradores y se presume que sólo era una pantalla para cubrir sus actividades delictivas.
Si bien desde un primer momento se trató de mantener el caso en la mayor reserva, con el correr de las horas, se conoció que el joven es hijo de un importante empresario dedicado a la fabricación de componentes para frenos, y la difusión de su identidad provocó conmoción en la ciudad y en los estratos sociales a los que frecuenta la familia, en particular.
De acuerdo a lo relatado por las víctimas, el modus operandi de Martín G. consistía en contactar a jóvenes mujeres, menores de edad algunas, mediante las redes sociales; las sondeaba sobre su situación económica y social y relaciones con su entorno familiar, y cuando detectaba condiciones de vulnerabilidad las citaba a su propio domicilio con el “anzuelo” de ofrecerles un buen trabajo.
Cuando las chicas estaban en la casa, les revelaba sus verdaderas intenciones, que pasaban por recibir favores sexuales y luego convertirlas en prostitutas.
La negativa de las mujeres terminaba en graves amenazas hacia su persona y a sus allegados afectivos más cercanos, haciendo ostentación de su impunidad debido a los importantes contactos de su familia.
Si bien no han trascendido mayores datos de las investigaciones, se supo que al menos fueron seis las mujeres que cayeron en el engaño de Martín G. Del mismo modo, se sabe que todas las involucradas cuentan con custodia policial, ante las temerarias amenazas recibidas, en caso de recurrir a la Policía o la Justicia a contar lo sucedido.
En la mañana del domingo, se desarrolló la audiencia imputativa solicitada por la fiscal Ángela Capitanio, titular de la sección Género, Familiar y Sexual (Gefas) de la Unidad Fiscal Rafaela ante la Sala Nº 1 bajo la conducción del juez Alejandro Mognaschi.
En este acto, la representante del Ministerio Público de la Acusación acusó a Martín G. como presunto autor de los delitos de: Promoción a la prostitución agravada por amenazas y por ser la víctima menor de 18 años y por la intervención de menores de 18 años; promoción a la prostitución agravada por ser la víctima menor de 18 años y por la intervención de menores de 18 años; amenazas coactivas agravadas por la intervención de menores de 18 años de edad; promoción a la corrupción agravada por amenazas y por ser la víctima menor de 18 años de edad; abuso sexual agravado por acceso carnal y promoción a la corrupción de menores de edad; amenazas y promoción a la prostitución”.
El juez Mognaschi concedió el pedido de la fiscal y fijó para este lunes la audiencia cautelar, que determinó la prisión preventiva para el imputado.
De acuerdo a lo que se filtró en medios tribunalicios, la estrategia de la defensa sería demostrar que Martín G. padece de una insanía mental, que le impide discernir correctamente y una de las primeras medidas que solicitarán es un examen psicológico.