El Litoral
La policía intentó realizar ayer allanamientos en Santa Rosa de Lima, pero la gente se resistió. Hoy volverán al barrio.
El Litoral
Personal policial intentó anoche realizar varios procedimientos en el barrio Santa Rosa de Lima en busca de esclarecer el robo del cargamento de soja del tren que descarriló el pasado sábado en ese barrio de la ciudad.
Debieron retirarse de allí a poco de iniciar las acciones ya que el operativo inició entrada la noche y los vecinos se resistieron a colaborar con la fuerza pública.
Los pesquisas tenían el dato de que en varias casas del barrio había bolsas con soja que provendría del vagón que descarriló y quedó esparcida a la vera de las vías. Los vecinos aseguran que se llevaron el cereal porque la policía les dijo que no tenían cómo quitarla de allí y se iba a degradar irremediablemente.
Es un hecho que la fracción de cargamento que quedó esparcida en el lugar del siniestro se echó a perder y genera hoy un olor intenso en las inmediaciones que se percibe claramente.
Según voceros policiales, se estima que hay repartidas entre varias casas de calle Estrada al 1600 cerca de 500 bolsas con soja. Los vecinos explicaron que ellos recogieron esa parte del cargamento y lo guardaron en las bolsas para conservarlo y ponerlo luego a la venta.
Incluso en una breve recorrida por las cuadras aledañas se pueden ver bolsas acumuladas en la vereda con lo que se confirma que no es un secreto para los vecinos que algunos de ellos poseen parte del cereal que se derramó en el descarrilamiento.
Sobre el operativo de este miércoles trascendió que participaron distintas agrupaciones de la fuerza policial y que unos vecinos arrojaron piedras a un móvil oficial y rompieron un parabrisas.
En la mañana la policía tiene previsto regresar al barrio, allí buscará decomisar las bolsas habientes y trasladar a cinco personas que fueron imputadas por robo. Junto a la fuerza pública irá el fiscal que investiga los hechos.