Rosario: imputaron al segundo detenido por el crimen de Ivana Garcilazo
Se trata del hombre de 40 años que se entregó el jueves. Fue acusado como coautor de homicidio agravado por ser cometido en ocasión de espectáculo deportivo. Mientras, sigue la búsqueda del otro implicado, que está prófugo. Un testigo que vio el partido con los 3 imputados dijo que antes de irse, el trío dijo que “con un poco de suerte ahora vamos y nos podemos pelear con alguien”.
Rosario: imputaron al segundo detenido por el crimen de Ivana Garcilazo
En la tarde del sábado 28 de octubre, en el Centro de Justicia Penal ubicado en la zona sur de Rosario, fue imputado el segundo involucrado en el crimen de Ivana Garcilazo, la simpatizante de Rosario Central que murió tras recibir un piedrazo en el cráneo en el atardecer del 30 de septiembre pasado, cuando volvía a su casa luego de presenciar el partido entre Rosario Central y Newell’s Old Boys. El fiscal Gastón Ávila presentó distintas pruebas y pidió que Juan Carlos Massón, alias Tuerca, de 40 años, quede en prisión preventiva por el plazo de ley (dos años), como coautor de homicidio agravado por ser cometido en ocasión de espectáculo deportivo, solicitud que fue avalada por la jueza María Trinidad Carrara. Por el crimen ya hay otra persona detenida, Ariel Cabrera, que se presentó casi dos semanas después del crimen.
En el marco de una audiencia que comenzó antes del mediodía, el fiscal Ávila le atribuyó a Juan José Massón, de 40 años, el delito de homicidio agravado por ser cometido con ocasión de espectáculo deportivo, en grado consumado en carácter de coautor.
Según explicó el fiscal, los tres imputados, Juan José Massón, Ariel Cabrera y Damián Reifenstuel (prófugo, con pedido de captura internacional) se juntaron en una vivienda ubicada en inmediaciones de Catamarca 3400, entre Iriondo y Cafferata, de barrio Agote, en el macrocentro de Rosario, para ver el partido de fútbol profesional entre los clubes Rosario Central y Newell’s Old Boys, con al menos 3 personas más.
Al finalizar dicho encuentro, los tres hombres se dirigieron hasta la intersección de las calles Montevideo y Ovidio Lagos (unas 30 cuadras al noreste). Según indicó el fiscal, un testigo que estuvo viendo el partido, cuando terminó el encuentro –que Central ganó por 1 a 0– dijo que el trío se iba y que "con un poco de suerte ahora vamos y nos podemos pelear con alguien”.
Ávila remarcó que una de las personas que estaba viendo el partido, que había sido invitado por el dueño de casa pero que no pertenecía al núcleo de amigos de Massón, Cabrera y Reifenstuel, les dijo: “tengan cuidado, no sean pelotudos porque si matan a una persona van 30 años en cana”.
Para el fiscal ese testimonio corrobora la hipótesis de que el trío fue hasta el lugar donde se cometió el crimen con la clara intención de agredir a alguien. “Yo sostengo, y es la teoría de la fiscalía, que las tres personas actuaron de manera coordinada, de una manera preordenada, que se estaban yendo de la casa con intenciones de someterse a una situación como mínimo de agredir. Entonces las tres actuaron en conjunto, tomaron todas las piedras en base a lo que dicen todos los testigos y todos arrojaron las piedras aceptando la posibilidad de que se produjera el resultado letal”, destacó Ávila.
Y agregó: “En ese sentido entiendo que, desde mi punto de vista, si bien es algo que no lo vamos a poder desentrañar nunca con claridad, quién de los tres o, mejor dicho, cuál de las piedras que lanzaron fue la que impactó en el cráneo de Ivana, los coloca a todos en una misma situación”.
La muerte de Ivana
Hace cuatro semanas, en el atardecer del sábado 30 de septiembre, Ivana Garcilazo iba en su moto, al igual que otras personas y vehículos, por Ovidio Lagos, en sentido sur-norte. Al llegar a la esquina de Montevideo, los tres imputados, al ver venir a la víctima con ropa que la identificaba como parcialidad de Rosario Central, en forma conjunta, tomaron baldosas de la vereda y las arrojaron violentamente contra la humanidad de la mujer, «asumiendo y aceptando la posibilidad cierta y probable de provocar su fallecimiento, tanto por el impacto directo de las piedras a la persona que se encontraba en movimiento como por la posibilidad de hacerla perder el control del moto vehículo e impactar contra el pavimento o ser arrollada por un vehículo».
Ivana sufrió un impacto en el cráneo que le causó un traumatismo encéfalo craneano grave y le produjo la muerte, por lo que cayó desplomada de su moto a los pocos metros. Tras esto, Reifenstuel y Massón huyeron del lugar por Montevideo al oeste, mientras que Cabrera se acercó con intenciones de agredir al novio de la víctima, quien en ese momento detuvo su marcha en el lugar para auxiliar a su pareja.
Ivana Garcilazo fue asesinada en el atardecer del sábado cuando volvía de ver el clásico entre Central y Newell’s. Crédito: Marcelo Manera
En ese encuentro, el novio de la víctima se defendió con una linga negra que tenía en su poder, la cual luego de un forcejeo quedó en manos de Cabrera, que huyó del lugar por calle Montevideo con dirección al este y antes de llegar a calle Callao, la arrojó al costado de un árbol en la vía pública.
Los imputados
Los imputados por el crimen son Juan José Massón, Ariel Cabrera y Damián Reifenstuel. El primero en ser detenido fue Cabrera, quien se presentó en la sede de la Agencia de Investigación Criminal (AIC) en la mañana del 12 de octubre, un día después que la Fiscalía diera a conocer los rostros y datos de 2 de los 2 involucrados.
En la tarde del miércoles 18, en el marco de la audiencia imputativa, el fiscal Ávila contó que Cabrera no modificó su rutina desde el día 1, y “continuó trabajando en el Club Social Lux (donde daba clases de educación física). El punto de inflexión es cuando se dan a conocer los videos, una vez que se dan las imágenes es donde nosotros notamos el cambio total: físico, de rutina y del lugar de residencia”. Tras aclarar que no se pudo precisar donde estuvo durante 48 horas, "finalmente se sintió acorralado, su cara y su nombre estaban en todos los medios públicos, no podía ir al trabajo, no podía estar con su familia que ya le habíamos allanado todos los domicilios y decidió presentarse”.
Massón tardó dos semanas más en entregarse. Lo hizo tras una serie de allanamientos realizados en su vivienda, ubicada en Humberto Primo al 1900, de barrio Ludueña y la de varios familiares.
Ambos están detenidos por homicidio agravado por ser cometido en ocasión de espectáculo deportivo, por el plazo de ley (dos años)
En tanto, continúa la búsqueda de Damián Reifenstuel, quien según se desprende de la investigación que encabeza el fiscal Ávila, “es altamente probable de que haya cruzado a través de la localidad de Salvador Mazza (Salta) a Bolivia. No pasó por un paso migratorio custodiado por Argentina, pero tenemos información fehaciente”. Con ese dato, desde el Ministerio Público de la Acusación se alertó al gobierno boliviano y se pidió la captura internacional de Reifenstuel a interpol.