Danilo Chiapello
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Durante meses sufrió amenazas y golpes por parte de su ex pareja. Hace días fue violada delante de sus hijos, todos menores de edad.
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El infierno de Celeste Soledad Paz (29) comenzó hace dos meses. Fue cuando tomó la decisión de separarse del hombre con el que tuvo sus tres hijos y con el que había compartido los últimos 10 años.
En rigor, la decisión de Celeste fue el capítulo final de una sucesión de hechos de violencia de género y familiar que venían ocurriendo desde hace bastante tiempo, pero que habían permanecido ocultos “un poco por miedo y otro poco por las amenazas que él me decía”, según reveló la mujer en diálogo con El Litoral.
Abrumada por la situación, la mujer dejó la finca que compartía con L.M.C. (de 28 años) en barrio La Esmeralda Sur, para acudir hasta la vivienda de su madre, donde se refugió junto a sus pequeños, de 8, 6 y 4 años.
Pero allí tampoco encontró calma, sino que padeció la peor de sus pesadillas. Lo que sigue es su relato.
Se tiró desde un techo
* “El lunes, a las 3 de la tarde, comenzó a sonar el timbre de la casa varias veces. Por la manera de insistir yo pensé: es él. Lo primero que hice fue llevar a mis hijos al dormitorio. Voy caminando para asegurar la puerta y él estaba espiando por la cerradura. Comenzó a gritarme ‘abrime que ya te vi que estás ahí’. Yo le decía que se fuera porque iba a llamar a la policía. Él me contesta: ‘Yo ahora me voy... pero vuelvo y te mato’ ”, comenzó su relato Celeste.
“Empecé a llamar al 911 y nada. Activé el botón de pánico y nada. Pasaron cinco minutos y empiezo a escuchar ruidos arriba del techo. Me imaginé que era él. Se escuchaban pasos fuertes. Atino a correr la cortina de una ventana y lo veo en el techo. Entonces corro a sacar a mis hijos de la pieza. Quería salir a la calle para pedir socorro a alguien. Pero no pude llegar. Cuando iba en camino a la puerta se tira desde el techo. Me agarra de los pelos y a los empujones me mete al garaje”.
Niños frente al horror
“Empezó a forcejear, me decía que quería volver. Yo le decía que no hiciera nada, que pensara que estaban sus hijos. A las patadas me tiró en un sillón y me viola. Después de eso yo quería zafar de la situación, pero él me empuja y me hace caer al suelo. Me agarra del cuello y yo sentía que se me dormían los brazos y las piernas. Creía que me moría. Él se asusta por cómo me había visto y le pide un vaso a mi hijo. Después me tira agua en la cara y la cabeza hasta que yo reacciono.
Yo lo que quería era que se fuera. Mis hijos estaban todos llorando. Incluso me enteré de que uno de mis hijos, como pudo, filmó todo con su celular”.
Como si nada
“Después, como si nada hubiese pasado, abraza a sus hijos, les da un beso y les pide perdón. A mí me abrazaba, me decía que quería volver, por las buenas o por las malas.
“Finalmente se fue. Yo lloraba sin parar y lo único que quería era bañarme. Me encierro en el baño porque estaba desesperaba. Al rato comenzó a tocar el timbre de nuevo. Pateaba el portón y gritaba para que le abriera la puerta. Yo llamaba a la policía. Pero me decían 911 y cortaban. Después de 20 minutos de terror, llegó un patrullero. Los policías se bajaron del coche y se lo llevaron detenido.
“Ahora lo único que ruego es que no salga. Porque una vez que salga va a ser peor. Nos va a matar a todos. Yo quiero recuperar mi vida normal, para mí y para mis hijos. Salir tranquilos, ir a la plaza sin ningún temor”, cerró.
Graves cargos
Este miércoles por la mañana la fiscal Yanina Tolosa atribuyó al imputado cinco hechos delictivos cometidos entre noviembre de 2017 y el lunes de esta semana, en distintos lugares de la capital provincial.
En tal sentido, Tolosa le imputó a LMC la autoría de:
* abuso sexual con acceso carnal.
* desobediencia de un mandato judicial (dos hechos).
* violación de domicilio.
* lesiones leves dolosas agravadas por el vínculo (dos hechos).
* amenazas coactivas (dos hechos) y amenazas simples.
Todos los delitos fueron atribuidos en concurso real entre sí.
“Relación desigual de poder entre un hombre y una mujer”
Los hechos que investiga la fiscal Tolosa fueron cometidos entre el domingo 12 de noviembre del año pasado y el lunes de esta semana. “Todos los ilícitos fueron cometidos en el marco de una relación desigual de poder entre un hombre respecto de una mujer”, sostuvo la fiscal.
* “El último episodio de violencia fue el lunes a la siesta, en la casa a la que se mudó la víctima luego de separarse del imputado, y en la que también viven los hijos menores de edad que tiene con el imputado”, relató Tolosa. “A pesar de que la mujer le negó el ingreso a la vivienda, el hombre trepó a la terraza y desde allí accedió al interior, donde abusó sexualmente de la mujer y también la agredió físicamente”, agregó la fiscal.
En la audiencia llevada a cabo esta mañana, la funcionaria del MPA recordó que el primer hecho sufrido por la víctima fue el 12 de noviembre en la vivienda que habitaba con el imputado cuando todavía eran pareja. “La mujer fue golpeada y amenazada de muerte”, señaló Tolosa. “Cinco días después, en horas de la tarde, fue agredida verbalmente por el hombre en la puerta de la escuela a la que asisten los hijos de ambos”, añadió.
“A raíz de estos hechos de noviembre, intervinieron especialistas del área de la Mujer de la Municipalidad de Santa Fe, que brindaron contención y asesoraron a la mujer”, destacó la fiscal. “Luego de la atención recibida, la mujer solicitó una medida de distancia que fue otorgada el 21 de noviembre por el Tribunal Colegiado de Familia número 5”, precisó.
Por último, Tolosa concluyó que “el imputado no cumplió la orden judicial que le prohibía acercarse a 200 metros, y el 12 de diciembre del año pasado fue a la casa de su ex pareja. Además, al día siguiente, le envió mensajes a través de la red social Facebook en los que la amenazó de muerte”.