Tres personas que estaban detenidas en una comisaría ubicada en la zona sudoeste de Rosario huyeron tras cortar una reja, y escapar por los techos de viviendas de la cuadra. Se presume que la evasión se dio en horas de la madrugada.
La evasión se descubrió durante el cambio de guardia. Se presume que huyeron durante la madrugada, tras cortar una reja y escapar por los techos.
Tres personas que estaban detenidas en una comisaría ubicada en la zona sudoeste de Rosario huyeron tras cortar una reja, y escapar por los techos de viviendas de la cuadra. Se presume que la evasión se dio en horas de la madrugada.
Quizás amparados por la lluvia o por el viento, tres personas de entre 26 y 30 años que estaban alojadas en la seccional 21ª, ubicada en avenida Arijón al 2300, entre Alvear y Santiago, a metros de bulevar Oroño y a unos 700 metros de avenida Circunvalación, de barrio Las Delicias, también conocido como San Francisco Solano, lograron escapar entre la madrugada y la mañana de este martes 18 de abril.
El hecho, que se descubrió después de las 7 AM, luego de un recuento de reclusos como parte del cambio de guardia, se presume que ocurrió durante la madrugada. En base a las primeras pericias, los ahora prófugos, identificados como Ezequiel M., de 26 años (estaba detenido desde el 23 de marzo por robo calificado); Oscar G., también de 26 años (preso desde el 9 de abril por un pedido de captura activo) y Jorge C. de 30 años (detenido desde el 12 de abril por tentativa de robo calificado), habrían cortado los barrotes de una reja que da a un patio interno y desde ese lugar subieron a los techos y lograron cruzar a techos de viviendas linderas.
La comisaría 21, como tantas otras, es una construcción ubicada en medio del barrio, que en su momento supo ser una vivienda de uso familiar. Con el paso del tiempo algunas de sus habitaciones se fueron convirtiendo en lugares de detención, mal llamados celdas (por su estructura).
Cabe recordar que la semana pasada, en un informe presentado por la saliente titular del Servicio Público Provincial de Defensa Penal, Jacquelina Balangione, había denunciado una dramática situación en las cárceles de la provincia, que están superpobladas. Lo mismo ocurría con las comisarías, muchas de ellas funcionando en lugares no construidos para albergar personas privadas de su libertad.
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