Una mujer de 80 años y quien se encuentra a su cuidado (otra mujer de 55 años) fueron víctimas de un violento delincuente que las tomó por asalto en el domicilio de la primera, en un grave suceso ocurrido durante la mañana del martes en Santo Tomé.
Las víctimas (de 80 y 55 años) fueron golpeadas por un delincuente que se terminó llevando dinero y un celular.
Una mujer de 80 años y quien se encuentra a su cuidado (otra mujer de 55 años) fueron víctimas de un violento delincuente que las tomó por asalto en el domicilio de la primera, en un grave suceso ocurrido durante la mañana del martes en Santo Tomé.
Según el relato de un testigo todo comenzó minutos después de las 8, en momentos que la cuidadora arribaba al domicilio de su patrona (en calle Balcarce al 1300) y fue sorprendida por un individuo que estaba oculto detrás de unos arbustos.
El agresor, visiblemente alterado y bajo los efectos de alguna sustancia, ingresó con violencia a la vivienda. Sin titubear, comenzó a agredir a la empleada, propinándole patadas y golpes en el suelo.
La situación se volvió más grave aun cuando el delincuente intentó llevar a la anciana al dormitorio. Fue entonces cuando la cuidadora se interpuso entre ambos, recibiendo golpes mientras intentaba proteger a la señora mayor.
Durante el forcejeo, el agresor sustrajo unos 20 mil pesos pertenecientes a la empleada, destinados a pagar el viaje de egresados de su hija a Córdoba.
La tensión creció cuando el ladrón también intentó arrebatar la billetera de la víctima, pero esta última logró persuadirlo ofreciéndole una alianza de oro a cambio. "No te lleves la billetera que ahí tengo todos mis documentos", rogó la damnificada al malviviente que aceptó el pedido.
No obstante luego se despachó con una macabra advertencia: "¡dame más … dame más.. porque sino la mato a la abuela!", gritó el delincuente que finalmente se terminó llevando un celular.
El incidente dejó a ambas mujeres con heridas físicas y psicológicas. Por su parte muchos de los vecinos se mostraron consternados por lo sucedido y reclamaron mayor vigilancia policial.