La tranquilidad de una familia se vio violentamente interrumpida en la madrugada del jueves cuando un ladrón ingresó a su casa e intentó abusar sexualmente de una niña de corta edad, en un grave hecho ocurrido en barrio Santa Rita.
Los gritos de la menor despertaron a sus padres que fueron en su auxilio y pusieron en fuga al malviviente, que salió corriendo desnudo.
La tranquilidad de una familia se vio violentamente interrumpida en la madrugada del jueves cuando un ladrón ingresó a su casa e intentó abusar sexualmente de una niña de corta edad, en un grave hecho ocurrido en barrio Santa Rita.
Los gritos desgarradores de la menor alertaron a sus padres, quienes acudieron rápidamente en su auxilio y lograron ahuyentar al agresor.
Según los primeros informes todo parece indicar que el intruso se ganó al interior de la casa aprovechando la rotura del vidrio de una puerta que comunica con un patio.
Luego fue hasta el dormitorio donde dormían los padres de la niña y sustrajo celulares y dinero que había en una riñonera.
Pero lo peor sucedió después. Cuando el malviviente se trasladó hasta el cuarto donde descansaba una menor de 11 años a la que le tapó la boca y le dijo que se desnudara. Claro que antes le advirtió que no grite porque sino la iba a matar.
Por fortuna la niña no obedeció y gritó igual, lo que permitió la inmediata reacción de su padre que, al escuchar, fue en su auxilio.
Cuando el padre llegó al dormitorio de la nena, el agresor ya había desaparecido. Su pantalón había quedado tirado en el suelo. Escapó desnudo corriendo hacia las viviendas linderas y su rastro se terminó de perder en la profunda oscuridad que impera en la zona.
"Acá lo material no importa. Lo único que me duele es que mi hija quedó muy mal. Ahora no quiere estar sola y llora todo el tiempo", dijo la madre en diálogo con El Litoral.
El suceso causó profunda consternación entre los vecinos de esa barriada y ha puesto en alerta a las autoridades policiales, quienes ya han iniciado las investigaciones correspondientes.