Carlos Retamal
La víctima tenía 34 años y fue atacada poco antes de la medianoche del martes en el barrio Arroyito Oeste. El vehículo sustraído fue hallado horas más tarde a unas 7 cuadras, con una pistola calibre 40 en su interior. Es el décimo asesinato en lo que va del mes de octubre.
Carlos Retamal
Un hombre de 34 años murió en los primeros minutos de este miércoles 20 de octubre, tras ser baleado por entre una y dos personas que le robaron el auto, cuando lo estaba guardando en una cochera a la vuelta de su casa, ubicada en el barrio Arroyito Oeste. El vehículo fue encontrado horas más tarde a unas siete cuadras del lugar del hecho.
El hecho se registró alrededor de las 23:30 del martes, cuando la víctima, identificada como Jozquín Pérez, estaba por guardar el auto en una cochera ubicada sobre pasaje Muñiz al 1200, a menos de 100 de su vivienda, que quedaba por Juan B. Justo al 1700.
En ese momento, fue abordado por entre una o dos personas –al menos una de ellas armada– que le pidieron que entragara el vehículo, un Renault Clio de color gris.
Por motivos que por el momento se desconocen, los asaltantes le efectuaron varios disparos desde muy corta distancia, hiriendo al dueño del auto, quien logró salir corriendo rumbo a su casa. Quedó tendido en la vereda y fue auxiliado por algunos vecinos, mientras otros denunciaron el hecho al 911 y pidieron una ambulancia.
Casi 15 minutos más tarde llegaron al lugar policías en varios patrulleros y un rato después, una ambulancia del Sies, que trasladó al hombre en grave estado hasta el hospital de emergencias Clemente Álvarez, donde falleció pocos minutos después de ingresar. Fuentes del caso indicaron que presentaba al menos 3 heridas de arma de fuego, dos en el tórax y la restante en la zona inguinal.
El dato
Éste es el décimo asesinato registrado en los 20 días de octubre y el número 186 en lo que va del año en el departamento Rosario.
Por orden del fiscal en turno de la Unidad de Homicidios Dolosos, Adrián Spelta, personal del gabinete criminalístico llevó a cabo distintas pericias en el lugar de la balacera, donde secuestró un espejo retrovisor astillado, en principio perteneciente al auto de la víctima y un juego de llaves. Además, levantó rastros en toda la cuadra, donde quedaron huellas de sangre que mostraron el recorrido del hombre tras ser baleado.
En horas de la madrugada, personal policial halló en inmediaciones de Olivé y Flynn, esto es a 7 cuadras de donde ocurrió al asalto, el vehículo robado, dominio FSI 535, con un vidrio estallado, restos de cristales en el asiento y un arma calibre 40 en su interior, que fue enviada a peritar.
Vecinos de la zona describieron a la víctima como un joven trabajador, arquitecto, que estaba casado y tenía una hija de 2 años.