Un muchacho de 28 años perdió su vida a poco de ser acribillado a tiros, en un sangriento hecho ocurrido durante la noche del viernes en barrio Los Troncos.
La víctima tenía 28 años. Murió a poco de ser trasladado al hospital Iturraspe. No hay detenidos.
Un muchacho de 28 años perdió su vida a poco de ser acribillado a tiros, en un sangriento hecho ocurrido durante la noche del viernes en barrio Los Troncos.
Del caso se tuvo conocimiento minutos antes de las 22 cuando varios llamados a la Central de Emergencias 911 dieron cuenta de escuchar numerosos disparos en la zona de pasaje Geneyro al 8100.
De inmediato varios patrulleros del Comando Radioeléctrico acudieron al lugar como así también móviles de la subcomisaría 12da. que corresponde por jurisdicción.
Los uniformados entrevistaron a algunos vecinos quienes informaron que momentos antes un joven gravemente herido había sido trasladado en un vehículo particular hasta el hospital Iturraspe.
Con esos datos los agentes se constituyeron en dicho nosocomio donde se les informó sobre el ingreso de Pablo Exequiel Orellano, de 28 años, quien se encontraba agonizando en la sala de shock room.
El nombrado presentaba 4 heridas de arma de fuego; (1) impacto en el brazo derecho; (1) impacto en el rostro y (2) impactos en el intercostal derecho.
Minutos después, pese a los esfuerzos realizados por salvarle la vida, se produjo su fallecimiento.
En cuanto a los pormenores del hecho se supo que el nombrado se encontraba parado frente a una vivienda en pasaje Geneyro 8100 cuando fue sorprendido por dos sujetos que aparecieron a bordo de una moto.
Éstos últimos descendieron del rodado y, sin dar tiempo a reacción alguna, efectuaron varios disparos contra el joven para luego darse a la fuga.
Como es de rigor de todo lo acontecido fue interiorizado el fiscal de Homicidios en turno quien dispuso la intervención del personal de la AIC, cuyos peritos trabajaron en la escena del suceso.