Un joven de 21 años ligado a la narcobanda rosarina “Los Monos” e implicado en el crimen del exconcejal de esta ciudad, Eduardo Trasante, fue condenado hoy a 10 años de prisión por una tentativa de homicidio por el que le habían ofrecido pagarle 100.000 pesos, informaron fuentes judiciales.
A través de un procedimiento abreviado, el joven identificado como Isaías Zenón acordó una condena a 10 años por el delito de tentativa de homicidio calificado por precio o promesa remuneratoria, y agravado por el uso de arma de fuego, en calidad de partícipe primario.
Como tenía una condena anterior a 3 años y 7 meses, se le unificó la pena en 13 años y 7 meses de prisión efectiva, informó hoy el Ministerio Público de la Acusación (MPA).
En el mismo juicio abreviado fue condenado por igual delito, pero en calidad de coautor, un joven identificado como Carlos Araya, quien acordó una pena de 11 años de cárcel, abundaron las fuentes.
Según la investigación, en julio del año pasado otro joven llamado Nicolás Toloza le ofreció a Zenón $ 100.000 para matar a un adolescente de 16 años.
Zenón, que estaba detenido, encargó la tarea criminal a Araya, quien el 18 de julio junto a Toloza y una o más personas atacó a tiros desde una motocicleta Honda Wave a la víctima en la zona de Garzón al 300bis de Rosario, de acuerdo a la sentencia.
El adolescente resultó herido y fue atendido en el Hospital Centenario de esta ciudad.
Según la investigación, con el dinero ofrecido por Zenón el joven Araya se encargó de comprar un automóvil, una moto y las armas de fuego para cometer el ataque.
Toloza, por su parte, fue condenado también como coautor de la tentativa de homicidio en abril pasado a 10 años y 3 meses de prisión, que se convirtieron en 16 años y 3 meses por una sentencia anterior, precisaron las fuentes.
Isaías Zenón también está imputado en la causa que investiga el asesinato del pastor y exconcejal de Rosario por el partido Ciudad Futura, Eduardo Trasante, ocurrido el 14 de julio del año pasado.
Trasante fue asesinado en el interior de su vivienda por dos personas que golpearon a la puerta y pidieron por un familiar, para una vez adentro disparar contra la víctima, que era el padre de unos de los militantes sociales asesinados en el triple crimen de Rosario en 2012.
La investigación de los fiscales Gastón Ávila y Matías Edery determinó que el auto que se utilizó para el crimen fue robado y que quienes lo habían comprado por 20 mil pesos –conociendo que era sustraído- actuaron por orden de Zenón, el joven que entonces cumplía condena por tenencia ilegítima de arma y vinculado a “Los Monos”, como presunto “soldadito” de la banda”.