El Litoral
sucesos@ellitoral.com
En la primera jornada de debate, la Fiscalía adelantó que pedirá penas de entre 20 y 25 años de cárcel para los tres. La defensa dijo que la denunciante miente y que no se puede sostener la causa con la sola declaración del chico.
El Litoral
sucesos@ellitoral.com
Un matrimonio esperancino y uno de sus hijos comenzaron a ser juzgados este miércoles por el presunto abuso sexual con acceso carnal y corrupción en perjuicio de su nieto y sobrino respectivamente. La apertura del debate estuvo a cargo del tribunal que preside la jueza Susana Luna, junto con sus pares Jorge Pegassano y Luis Octavio Silva, quienes en la primera jornada de juicio escucharon los alegatos de las partes.
Primero fue el Ministerio Público de la Acusación, a través de los fiscales Omar De Pedro y Daniel Filippi, quienes realizaron un apretado resumen de los hechos y definieron los delitos y penas que a fin de cuentas pedirán para Víctor Hugo Baraldo, su esposa Nidia Noemí Morandini y el hijo de ambos, Juan Pablo Baraldo. Con la adhesión de la parte querellante, representada por el abogado particular Martín Risso Patrón, la fiscalía pidió 22 años de prisión para el abuelo Baraldo, como presunto autor de los delitos de “abuso sexual con acceso carnal agravado (por resultar grave daño en la salud mental de la víctima; por ser cometido por ascendiente, encargado de la educación y guarda; por ser cometido por dos personas; y por aprovechar la situación de convivencia preexistente con el niño menor de edad) y promoción de la corrupción de menor agravada (por ser la víctima menor de 13 años; y por ser ascendiente y persona conviviente y encargada de la educación y guarda del menor), ambos delitos en concurso ideal”.
También solicitaron 20 años de cárcel para el tío, el policía Juan Pablo Baraldo, por el abuso sexual con acceso carnal agravado y promoción de la corrupción de menor agravada en concurso ideal; así como por coacción agravada por el uso de arma de fuego y desobediencia a un mandato judicial.
En tanto reclamaron 25 años de prisión para Morandini como autora del delito de “promoción de la corrupción de un menor agravada”; y como partícipe principal de “abuso sexual con acceso carnal reiterado agravado”.
La denuncia
Para el Ministerio Público, los abusos se habrían producido entre los 5 y 9 años, en el seno familiar cuando el niño estaba al cuidado de sus abuelos maternos. Según consta en la documentación del caso, la denuncia se produjo en agosto de 2014 y la realizó la madre de la criatura, quien a su vez es hija y hermana de los imputados.
Una foto almacenada en el teléfono celular del niño en la que se podía ver los genitales de una persona mayor y el contexto del mobiliario que llevó a identificarlo como la casa de sus padres, llevó a la denunciante y su actual pareja a indagar en una historia que cuatro años después derivó en el juicio oral que acaba de comenzar.
Por su parte, la defensa que está a cargo de los abogados Alejandra Forte y Eduardo Jauchen, acompañados por el psicólogo Pablo Brigiler, no sólo negaron la ocurrencia de los hechos, sino que calificaron a la denunciante de “mentirosa” y desacreditaron la labor de los psicólogos que entrevistaron al menor, ya sea en sede policial como en cámara Gesell.
“El niño no ha sido accedido carnalmente”, desmintieron los abogados, que le reprocharon a la fiscalía haber perdido “la objetividad” y haber trabajado una “hipótesis única” y que a pesar de ello “hacen una atribución laxa” “sin precisar hasta cuándo habrían sucedido los hechos”.
Por último, criticaron que desde el Ministerio Público inauguraron un nuevo espacio de denuncia participando a los medios” lo que llevó a la acusación a “romper todos los protocolos para menores víctimas de abuso sexual”.
En tal sentido postularon la inocencia de los abuelos y el tío del menor que según dijeron, están presos hace tres años “por los dichos de un niño cuyo relato “ha sido obtenido mediante presiones”.
Testimoniales
Tras los alegatos de apertura el tribunal dio por finalizada la audiencia y convocó a las partes para el próximo martes 31 de octubre para comenzar con la etapa de las declaraciones testimoniales, previstas para ese día y los subsiguientes. Los alegatos de clausura, en tanto, fueron programados para el lunes 6 de noviembre. Por último, está previsto que la sentencia se dé a conocer el miércoles 8 de noviembre, según lo establece la agenda de la Oficina de Gestión Judicial.