Dos de los rugbiers que estaban detenidos por el crimen de Fernando Báez Sosa en Villa Gesell fueron liberados este lunes por la tarde luego de que la fiscal de la causa solicitó el cese de sus prisiones preventivas por falta de pruebas.
Alejo Milanesi, de 20 años, y Juan Pedro Guarino, de 19, abandonaron el penal de Dolores tras la solicitud de la fiscal Verónica Zambroni, quien pidió la prisión preventiva para los otro ocho acusados.
Dos de los rugbiers que estaban detenidos por el crimen de Fernando Báez Sosa en Villa Gesell fueron liberados este lunes por la tarde luego de que la fiscal de la causa solicitó el cese de sus prisiones preventivas por falta de pruebas.
Acompañados por el defensor Hugo Tomei, Alejo Milanesi y Juan Pedro Guarino salieron a las 15.25 de la Unidad Penal 6 de Dolores y abordaron un auto para alejarse de la zona y encontrarse con sus respectivos familiares,
Ninguno de los jóvenes realizó declaraciones a la prensa que los esperaba en la puerta de la cárcel y sólo el padre de uno de ellos, Raúl Guarino, manifestó en un contacto telefónico con Télam que se "hizo justicia" con su hijo.
Las liberaciones de ambos rugbiers fueron dispuestas por el juez de Garantías de Dolores David Mancinelli, luego de que la fiscal de Villa Gesel a cargo de la causa, Verónica Zamboni, fundamentara ese pedido con que ninguno fue reconocido en las ruedas de personas y por el “beneficio de la duda”.
“A la luz del resultado negativo de la diligencia de reconocimiento de personas en relación a los encausado Guarino y Milanesi, ésta Titular de la Vindicta Pública, entiende que debe cesar la medida de coerción personal que pesa sobre ellos”, señala Zamboni en el dictamen al que accedió Télam.
La fiscal afirma que "si bien se ha acreditado que los co-encausados estuvieron con los demás esa noche, hasta la actualidad se han llevado a cabo innumerables medidas de investigación que no han permitido vincularlos a la muerte de Fernando".
"Ha variado mi convicción en cuanto a la participación de éstos dos imputados en el homicidio endilgado", señala Zamboni en otro tramo del escrito y recuerda que “toda duda en el proceso debe ser valorada a favor de los imputados, conforme las garantías constitucionales que deben respetarse en el proceso”.
Respecto de Milanesi, afirma la fiscal que ninguno de los testigos “lo han podido reconocer ni como agresor de la víctima, ni de ningún otro amigo de Fernando” y que “solo uno de ellos lo vio parado en las inmediaciones” pero “sin participar en la gresca”.
Además, explica que si bien Milanesi presentaba lesiones en sus manos, “no pudieron acreditarse fehacientemente que guarden vinculación con la presente pesquisa”.
En relación a Juan Guarino, la fiscal señala que “si bien el mismo se halla filmado saliendo del bailable Le Brique (...), nada lo ubica en la agresión misma a Fernando” y en ese sentido recordó “el resultado negativo de la totalidad de los reconocimientos en rueda de personas desarrollados” y que “un solo testigo lo ubicó en las inmediaciones del lugar”.
“Ningún registro fílmico de los aportados, lo ha grabado agrediendo a alguna persona, sino solo caminando”, dice la fiscal.
También manifiesta que “analizada la lesión que presentaba el día de su aprehensión -una posible quemadura en su mano- no ha podido acreditarse hasta el momento que se vincule y/o guarde relación con el hecho”.
Por último, Zamboni señala que la libertad de Guarino y Milanesi “de ningún modo implica su desvinculación del proceso" en el que restan diligencias a desarrollar y pidió que estén a disposición de la Justicia hasta que termine el proceso.
Con información de Télam