Un hombre de 27 años, integrante de la comunidad zíngara de Mar del Plata, intentó cometer una estafa telefónica pero al ser descubierto huyó y fue detenido poco después cuando ocasionó una violenta colisión.
La víctima descubrió al estafador y le tendió una trampa. Al querer escapar de la policía junto a un supuesto cómplice, el sospechoso provocó dos choques.
Un hombre de 27 años, integrante de la comunidad zíngara de Mar del Plata, intentó cometer una estafa telefónica pero al ser descubierto huyó y fue detenido poco después cuando ocasionó una violenta colisión.
El episodio contó además con una cruel circunstancia: el jubilado que iba a ser estafado se dio cuenta de que era un “cuento del tío” ya que el delincuente le aseguró que hablaba de parte de un hijo, cuando en realidad su único hijo había fallecido.
El segundo estafador, aprovechando la confusión del choque, pudo escapar y perderse del personal policial que participó en la persecución.
El hecho se inició en horas del mediodía de este viernes cuando un hombre de 76 años recibió una llamada telefónica y al atender se encontró con un interlocutor que le decía hablar de parte de su hijo. Que con éste había ya acordado facilitarle el cambio de dólares que tenía en la casa. El jubilado lo dejó hablar sabiendo que se trataba de una estafa ya que su hijo acordado con su hijo el cambio de los dólares que tenía ahorrados. El discurso le permitió al dueño de casa, darse cuenta que se trataba de un cuento del tío, ya que ese hijo había fallecido tiempo atrás. Sin embargo, indignado, decidió coordinar un encuentro para enfrentarlo cara a cara. La cita se materializó en el cruce de las calles Rawson y Malvinas, donde la víctima lo insultó y le reprochó lo que estaba haciendo.
El estafador, identificado posteriormente como Nicolás Demetrio (27), al ver frustrado su propósito quiso, al menos, robarle al hombre el teléfono celular y escapar a bordo de un Peugeot 301 de color blanco donde lo aguardaba al volante un cómplice.
De inmediato el damnificado se comunicó con el 911 y tras una búsqueda por la zona del encuentro un móvil del Comando de Patrullas y otro de de la Policía Local pudieron avistarlo en Teodoro Bronzini y Colón. Así fue como se inició una persecución accidentada, porque en Bolívar y Neuquén el Peugeot colisionó contra un Volkswagen Fox. Pese a esto continuó la fuga y al llegar a 1° de Mayo y Avellaneda, nuevamente chocó, esta vez contra un camión y quedó inutilizado. Los dos delincuentes huyeron a pie, pero Demetrio fue detenido a poca distancia.
La policía interviniente refirió que no hubo heridos entre los ocupantes de los otros automóviles chocados. Por otra parte, desde el interior del Peugeot se recuperó el teléfono celular robado a la víctima, de modo que se le dio intervención al fiscal de Flagrancia, Gastón De Marco, que inició actuaciones por los delitos de robo en grado de tentativa y tentativa de estafa.